MÉXICO -- En general el trabajo del árbitro Fernando Guerrero me pareció muy acertado en el Clásico Joven del futbol mexicano que terminó con la victoria (2-1) de Cruz Azul sobre el América, en duelo disputado en el Estadio Azteca.
El central de 32 años demostró temple y personalidad y mostró muy bien las tarjetas amarillas, con las cuales aplacó a los jugadores que en todo momento le manotearon como fue el caso de Francisco "Maza" Rodríguez, Édgar "El Rifle" Andrade y Rubens Sambueza, tres elementos del América que fueron amonestados por protestar las decisiones arbitrales.
Guerrero estuvo a la altura del partido y le dio mucha fluidez. Las expulsiones fueron correctas, tanto la de Andrade como la de Sambueza.
En el caso del argentino, le muestra muy bien la primera tarjeta al minuto 20 por una falta y en la recta final del encuentro le muestra una segunda por reclamar, en lo que claramente fue una acción infantil por parte del azulcrema pues el partido ya estaba en tiempo de compensación y ahora no podrá ver acción la siguiente jornada.
En el caso de Andrade, el colombiano que entró de cambio y no duró ni 10 minutos en el partido, Guerrero tomó una acertada decisión. Sus dos tarjetas amarillas fueron bien justificadas.
Además, la anulación del gol de Andrade fue una acertada decisión, pues claramente el jugador de las Águilas estaba en posición adelantada en el momento en que se da el servicio.
Creo que por ahí, a Guerrero nada más se le escapa una acción al final del partido donde el central americanista Aquivaldo Mosquera pisa en la cara a Joao Rojas, aunque también hay que señalar que le hace falta apoyo por parte de su árbitro asistente que estaba de frente a la jugada.
En general me parece un arbitraje redondo, un arbitraje de muy buen nivel. Fernando Guerrero sigue creciendo en calidad y ojalá lo sigamos viendo en más partidos de este nivel haciendo buenos trabajos. Hay que felicitar a la tripleta arbitral porque el trabajo fue bastante bueno para un partido de esta envergadura.