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Tiempo de momios

MÉXICO -- El arranque de un nuevo torneo siempre se convierte en un momento de ilusión y esperanza para aficionados, jugadores, técnicos y directivos, sin embargo los resultados al correr de las jornadas, algunos antes de lo esperado, provocarán cambios que obligan a la reflexión... o a cruzar apuestas.

El morbo lleva a pensar quién será el primer técnico en quedar desempleado y los candidatos son varios, pero en este juego de ruleta rusa siempre aparecen sorpresas en donde menos se espera.

Si se toma en cuenta la situación del plantel, los conflictos internos con directiva y la poca experiencia del técnico, podríamos pensar que el primero en dejar su puesto será Salvador Reyes, con el Querétaro, esto claro, sin desearle mala suerte, pero los números son fríos.

Querétaro es el equipo recién ascendido y por tanto, su permanencia depende únicamente de lo que haga en los próximos dos torneos, así que cualquier victoria es muy valiosa, pero los tropiezos son doblemente dolorosos.

Esto ya es suficiente presión para un equipo que está obligado a jugar sin errores, pero que tiene como presión extra el saber que a unas horas de arrancar la liga no estaban seguros de jugar, por la falta de apoyo económico, situación más que preocupante y que recuerda lo ocurrido dos años atrás cuando los pagos eran en efectivo, al pie de cancha por 'asistentes' del ex propietario, quien mandaba portafolios de dinero, cuando ya había dos o tres quincenas de retraso.

Irónicamente otro que podría estar en riesgo es el técnico campeón, José Luis Trejo, que se reevaluó después de coronarse con Pachuca, y esto le valió para negociar un excelente contrato con Tigres.

Así que el entrenador campeón está obligado a salir adelante con triunfos y no le permitirán que en la liga mantenga las derrotas como las ocurridas en pretemporada ante Boca Juniors y Barcelona, que lejos de convertirse en partidos para festejo previo a la liga, fueron pesadillas que sacaron a flote las carencias.

El que parece que no 've la suya' es el 'Ojitos' Enrique Meza, que dejó atrás los tiempos gloriosos con Toluca, y después de la selección parece haber perdido el toque exitoso. Será tan fuerte la mala suerte de haber fallado con el Tri que no podrá mantener al Pachuca.

Si Meza pensaba regresar a los primeros planos del fútbol mexicano tiene ante sí la mejor oportunidad, dirigir al campeón, algo que muchos envidiaría. Pero por lo mismo la exigencia es mayor y la afición y la directiva no aceptarán si llegan malos resultados o si no se mantienen en los primeros planos durante todo el torneo.

Morelia es otro equipo de exigencia que arriesga a un nuevo técnico, Hugo Hernández, un conocedor del fútbol mexicano que ha estado al lado de muchos como auxiliar, aunque siempre se ha dicho que en realidad él era quien llevaba la parte táctica mientras otros daban la cara.

Pues bien, en esta ocasión no habrá nadie al frente y se llevará la gloria o se apuntará el fracaso que en el Morelia ronda muy cerca por los malos resultados.

Pumas vivirá dos torneos de una presión interminable, pues gracias a los dos últimos años ahora arranca en el fondo de la tabla de porcentajes y cada derrota los pondrá con un pie en Primera A.

Ricardo 'Tuca' Ferreti conoce a la perfección el espíritu universitario, y debería ser el más indicado para salvarlos, sin embargo, no es un técnico acostumbrado a pelear por salvar el descenso y esta nueva presión podría hacer estallar a un técnico que de por sí es conocido con poca paciencia.

Todavía no empezaba el torneo y Wilson Graniolati ya estaba en problemas, pues la drectiva lo ratificó, pero no se sabe si en realidad confiaron en él luego de los malos resultados del torneo previo, o no encontraron otro candidato.

Graniolati debería tener la ventaja porque conoce al plantel, pero la salida de su goleador Matías Vuoso y sobre todo, la pérdida de esa etiqueta de equipo invencible en casa lo ponen en una situación complicada.

En contraparte están los técnicos que no deben tener problemas para mantenerse y los que, con un poco de buenos resultados navegarán tranquilos hasta la última jornada, aunque no lleguen a liguilla.

Carlos Reinoso, con los Tecos, puede tener un torneo tan tranquilo como sólo lo puede pensar alguien que se aburrió de jugar golf y aceptó regresar a dirigir, para no estar en casa.

Si después de escuchar este argumento la directiva de Tecos aceptó contratarlo quiere decir que la exigencia no es mayor, pero al menos debe mantener al equipo a media tabla, aunque que a veces no es tan sencillo para un club que suele navegar torneos sin llamar la atención ni levantar pasiones.

Mientras que de los que deben llegar a buen término, pero en el fútbol no hay nada escrito, y menos cuando se trata de caprichos de directivas, podrían ser los hermanos Tena, Luis Fernando y Alfredo, con el América.

Esta dupla no necesita recibir consejos por intercomunicador y por sí mismos deben tener más experiencia y capacidad que muchos otros equipos, aunque si desventaja es su calidad, ya que junto con sus jugadores están obligados a llegar hasta la corona.

Isaac Mizrahi ya probó suerte con Cruz Azul y sabe que es un equipo que sólo necesita un pequeño empujón para que tome su paso y se mantenga sin mayores contratiempos hasta la liguilla, aunque de la etapa de finales mejor ni hablar. Lo único que podría dejarlos en el camino es que Mizrahi no encuentre con quién cubrir los huecos.

José Manuel 'Chepo' de la Torre ya probó su capacidad en la liga y en Libertadores y mantiene un plantel con el cual puede pelear nuevamente por clasificar y avanzar más allá, pero para nadie es secreto que es el equipo más 'inestable', pues su propietario Jorge Vergara puede decidir despedirlo el día menos pensado, porque algo no funciona como él lo desea.

La lista continúa, pero en realidad atinar a los cambios en el fútbol mexicano es tan difícil que es mejor apostar al Melate, o a ganar en el Cesar's Palace de Las Vegas.