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Se terminó la espera

PEKIN -- El tenista chileno Fernando González puso fin el domingo a dos años de sequía de títulos y ganó el Abierto de China al imponerse por 6-1, 3-6 y 6-1 al español Tommy Robredo.

El cemento rápido del Beijing Tennis Centre enfrentó la solidez de Robredo, más regular esta temporada, y la resurrección de González, recién salido de una nefasta racha de derrotas, en un duelo trascendental para la Carrera de Campeones de la ATP.

El primer set lo resolvió El Bombardero de La Reina, número siete del mundo, con un juego expeditivo, basado en su acierto en el primer saque y la potencia de su derecha, que hizo imposible al español remontar un 3-0 en contra inicial, y que hizo presagiar un paseo del chileno.

Sin embargo, ya en el segundo set, cuando la"mano de González perdió precisión en la ejecución, Robredo despertó y demostró tener un amplio abanico de recursos con los que hacer frente a la energía y motivación del chileno.

Con 4-1 para el español, y pese a tener encauzado el capítulo, González aún ofreció resistencia al romper el servicio de Robredo en el séptimo juego, pero éste devolvió la rotura al instante y logró forzar el tercer set.

El set decisivo se decidió en el cuarto juego, que se tornó inacabable, y donde la suerte del partido fue de un lado a otro de la pista hasta que González materializó la rotura del servicio de Robredo, a la larga decisiva.

Con 3-1 en contra, el español pareció tirar la toalla, lo que permitió a González sentenciar la final en una hora y 45 minutos y levantar un título dos años después de su última victoria en Basilea, y tras dos intentos fallidos, esta temporada, en Australia y Roma.

La superioridad de González quedó patente en las gradas, donde si bien la afición chilena se mostró más ruidosa, el circuito tuvo la oportunidad de asistir a la aparición de una nueva figura: "la animadora neutral", encarnada en varias decenas de fanáticas chinas que insuflan ánimos al perdedor de cada juego.

Pese a todo, el chileno se llevó la mayoría de los elogios, gracias a sus golpes espectaculares y al mayor ímpetu mostrado durante el torneo, que no han pasado inadvertidos para Hans Gilemeister, capitán del equipo chileno de Copa Davis.

Chile afronta a fin de mes una decisiva eliminatoria de repesca contra Israel, en la que Gilemeister podrá contar, además de con Nicolás Massú, con el renacido González.

Por su parte, Robredo no pudo reeditar su victoria de julio en el torneo polaco de Sopot y se complica su presencia en el Masters Series de Shanghai de noviembre, para el que aún restan cinco plazas por decidirse, que cuentan ahora con la nueva candidatura de Fernando González.