BUENOS AIRES -- El entrenador de Independiente, Claudio Borghi, dejó en claro que se siente más que incómodo en el escenario actual, al afirmar que "para una persona es feo depender de si ganás o si perdés".
Borghi, ubicado en el ojo de la tormenta tras los empates y las flojas actuaciones del equipo en los partidos frente a Racing Club y Gimnasia y Esgrima La Plata, dijo ser consciente de que en el fútbol argentino "si ganás sos un fenómeno, y si perdés sos un tarado".
"Pero eso a mí no me gusta", dijo el técnico, quien el lunes fue ratificado en el cargo por el presidente del club, Julio Comparada.
"Es feo para una persona depender de si ganás o si perdés. Si gano soy Gardel, y si pierdo, no lo soy. Lo tengo más que confirmado a eso", agregó al ser consultado sobre si el próximo partido, el clásico del 14 de este mes ante Boca en La Bombonera, será decisivo para su continuidad.
Tras confesar que "es muy duro ser criticado", comentó que no lee más los diarios ni mira más programas deportivos en televisión porque en los últimos días recibió algunas críticas que considera desmesuradas.
Con todo, afirmó que los cuestionamientos no lo sorprenden porque -comentó- "estoy lidiando con mi nombre desde los 17 años", en alusión a las presiones que soporta desde sus tiempos de futbolista.
Aunque sin brindar precisiones, hizo mención a supuestas peleas en el seno del club: "Hay problemas que no son míos, entonces no me los pasen a mí. Hay peleas que no son mías". Borghi explicó que el lunes se reunió con Comparada pues el parate de 15 días por la disputa de una nueva doble fecha de las Eliminatorias para el Mundial de Sudáfrica 2010 era un momento adecuado para definir si su continuidad era lo más aconsejable.
"No sé si sé o no sé de fútbol, pero honesto soy y a veces entiendo que el entrenador es un problema o una piedra. Viendo algunos diarios y escuchando algunos programas de televisión, Borghi es el problema. Eso se nota. Además, este es un semestre especial porque habrá elecciones en el club", señaló.
Y agregó: "Teniendo en cuenta que hay 15 días hasta el próximo partido, uno dice: 'Es el momento de ver si estamos todos de acuerdo o no'. Y el presidente me dijo que si bien no somos el Real Madrid, tampoco estamos tan mal".
En ese sentido, Borghi reconoció que es cierto que podrían "ir primeros", pero destacó que el equipo está "tercero", con seis puntos sobre 12 posibles, producto de una victoria y tres empates.
"Vamos a ver qué podemos seguir haciendo", cerró, acaso dando a entender que su continuidad dependerá de que el equipo gane o en todo caso no pierda en su próxima visita a La Bombonera.
Por otro lado, el equipo regresó el martes a la mañana a los entrenamientos y, mientras los jugadores realizaban trabajos de fútbol en espacios reducidos, Borghi mantuvo una charla con el dirigente Daniel "Cacho" Vázquez, del Departamento de Fútbol del club.
Para el clásico ante Boca, el técnico podrá contar con el delantero Ismael Sosa, quien se recuperó de una lesión en la zona inguinal y realizó trabajos diferenciados.
En cambio, el que no estará frente a Boca es el mediocampista Damián Ledesma, expulsado frente a Gimnasia y Esgrima La Plata.