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Experiencia y liderazgo

SANTIAGO DE CHILE -- A sus 19 años, Charles Aránguiz se ha convertido, por calidad y experiencia, en uno de los máximos referentes de la selección de Chile que jugará el Sudamericano Sub 20 en busca de una plaza al próximo Mundial de Egipto.

Nacido en una localidad vecina a Santiago el 17 de abril de 1989, Charles Aránguiz Sandoval se formó como futbolista en Cobreloa, donde fue integrado al primer equipo el año 2005, siendo casi un niño y para el que en 2008 jugó 32 partidos: trece en el torneo Apertura y 19 en el Clausura.

Una continuidad ganada por la facilidad con que maneja el balón, su visión del campo de juego, inteligencia para servir siempre pelotas "con intención" a sus compañeros y un espíritu de sacrificio a toda prueba, según los técnicos que lo han dirigido.

Algunos analistas locales han comparado a Aránguiz con Alexis Sánchez, que en la actualidad juega con el Udinese italiano y que también hizo sus primeras armas en el Cobreloa, pero la verdad es que Aránguiz es menos vistoso pero más cerebral que el Niño Maravilla, quien es delantero.

Las cualidades de Aránguiz lo han llevado a vivir algunas convocatorias de Marcelo Bielsa a la selección mayor.

Tras un breve paso por Universidad de Chile, a los 11 años, Aránguiz se afincó a los doce en Cobreloa, con el que debutó cuando tenía 16 en un 'clásico' minero frente al Cobresal, que fue un triunfo para los 'Zorros del Desierto', en el Torneo Apertura 2006.

En su segundo partido, contra el O'Higgins, Aránguiz anotó su primer gol en primera división, pero la prensa se fijó en él algunas semanas más tarde y lo calificó de figura del partido, cuando aportó el pase gol para el triunfo minero sobre el Universidad de Chile

El mismo 2006 fue convocado a la selección Sub'19, junto con Alexis Sánchez, pero el entrenador Jorge Aravena no le dio oportunidades. Sin embargo, al año siguiente participó en la 'Milk Cup', en Irlanda del Norte, y el año pasado, además de repetirse ese torneo, fue parte del equipo que ganó en México el torneo 'Joao Havelange'.

Ivo Basay sostiene que su equipo vale por el grupo y ha reiterado que "aquí no hay nadie indiscutible", apuntando a que la lucha por la titularidad es permanente.

Con madurez, Aránguiz concuerda y señala que sólo ve superior su responsabilidad en el equipo, debido a su mayor experiencia: "Los que hemos tenido más competición tenemos más responsabilidad en el equipo", sintetizó.

"Acá depende de todo el grupo. No somos un equipo que dependemos de figuras", añadió Aránguiz, cuyo sueño secreto es jugar en el fútbol español, a su juicio el mejor del mundo.