<
>

Culpa del gobierno

La Asociación de Jugadores de Grandes Ligas (MLBPA, por sus siglas en inglés) descartó haber tenido la oportunidad de destruir la lista en la que aparecen 104 jugadores que dieron positivo en un estudio para establecer pruebas de dopaje en el béisbol.

Según un acuerdo entre el sindicato y Grandes Ligas, dichas pruebas se mantendrían bajo confidencia y anonimato, y sus resultados sólo serían utilizados para fijar los parámetros en las pruebas de dopaje del deporte. Bajo el acuerdo, la MLBPA tenía derecho a destruir todo lo relacionado al sondeo sin mayores repercusiones.

"Primero, se ha cuestionado por qué los resultados de nuestro sondeo del 2003 no fueron destruidos antes de que fueran adquiridos por el gobierno en la primavera del 2004", indicó Donald Fehr, director de la MLBPA, en un comunicado relacionado a los reportes sobre Alex Rodríguez y el programa de pruebas de Grandes Ligas del 2003. "La respuesta corta es que en noviembre del 2003, antes que eso pudiera suceder, un gran jurado emitió un reclamo legal para obtener los documentos del programa".

"A mitad de noviembre de 2003, los resultados del sondeo de 2003 fueron tabulados y finalizados. La MLBPA recibió los resultados por primera vez el martes 11 de noviembre. Los resultados fueron completados el jueves 13 de noviembre, y los jugadores fueron avisados mediante un memo con fecha del viernes 14 de noviembre", dijo Fehr.

Explicó que justo mientras comenzaba el proceso de destruir los documentos, el gobierno intervino por medio de una petición de evidencia de Gran Jurado y posteriormente un allanamiento. Desde entonces, tanto el gobierno como la MLBPA han estado enfrascados en una batalla legal para determinar la validez del allanamiento y dónde irán a parar los documentos.

"Poco después, se tomaron los primeros pasos para comenzar el proceso de destruir los materiales de prueba y los documentos, según contemplado por el convenio colectivo. Sin embargo, el 19 de noviembre, nos percatamos de que el gobierno había emitido un reclamo legal. Al conocer esto, nosotros concluimos, por supuesto, que sería impropio proceder con la destrucción de los materiales".

Fehr indicó que en 2004 tres jueces federales de distrito en tres distritos judiciales diferentes decidieron que los allanamientos del gobierno eran inconstitucionales y ordenó la entrega de todos los materiales confiscados, excepto por aquellos relacionados unos 10 jugadores nombrados en la orden original del Gran Jurado. El caso aún está bajo la consideración del Noveno Circuito de la Corte de Apelaciones de Estados Unidos.

El abogado sindicalista también acudió al rescate de Gene Orza, el presidente de la MLBPA, quien ha sido señalado por los medios como alguien que alertó a los jugadores de que las pruebas estaban de camino.

"La segunda pregunta que se ha levantado en días recientes es si Gene Orza o cualquier otro oficial de MLBPA estuvo involucrado en alertar indebidamente a los jugadores sobre las pruebas del 2004", dijo Fehr. "Como hemos dicho anteriormente, no hubo ninguna alerta impropia a los jugadores. Cualquier alegación de que Gene Orza o cualquier otro oficial de la MLBPA actuó incorrectamente está equivocada".