ARLINGTON -- Para el mejor corredor de la NFL, el domingo era uno de los partidos más especiales de la temporada, quizá el más.
Adrián Peterson, originario de un poblado cercano a Dallas y egresado de la Universidad de Oklahoma, jugó por primera vez en Arlington contra los Cowboys, el equipo al que idolatró desde que era niño.
Fue el primer partido como visitante frente a los Cowboys desde su año de novato en el 2007, cuando ganó en el viejo Texas Stadium.
Sin embargo, Peterson perdió un partido que consideró pudo ganar con sus Minnesota Vikings.
"Desaprovechamos muchas oportunidades que tuvimos cuando se nos presentaron", declaró Peterson al final del partido que los Vikings perdieron 27-24 y que ganaban cuando faltaban 35 segundos por jugar. "No pudimos hacer una jugada más".
"Tenemos que seguir trabajando", agregó. "Este era uno de esos partidos que se ganan como visitantes y que al final nos van a pesar. Tuvimos oportunidad hoy".
Este domingo, los Vikings dejaron su marca en 1-7, la peor desde 1961, el año de fundación de la franquicia.
"Se siente terrible", señaló Peterson. "Pero aún tenemos ocho [partidos] más por jugar. Es algo que nos debe motivar para mejorar".
Pero Peterson fue uno de los que menos culpa tuvo; corrió para 140 yardas en 25 acarreos, el más largo de 52 yardas y una anotación que logró con base en su habilidad personal, cuando parecía que ya estaba derribado 10 yardas atrás de la zona final.
Más de la mitad de sus yardas fueron ganadas después del primer contacto.
"Es un corredor extraordinario", indicó el entrenador en jefe de los Cowboys, Jason Garrett. "Tuvimos oportunidad de dirigirlo en el Pro Bowl del 2009 y no tiene ninguna debilidad. Todo lo hace bien y su actitud es inmejorable".
"Es el mejor corredor de la liga", agregó. "Y es imposible detenerlo; sólo hay que tratar de minimizar el daño y mantenerlo en sus promedios".
Frente a los Cowboys fue su primer partido de 100 yardas desde que consiguieron la única victoria de la temporada, el 29 de septiembre en Londres, contra los Steelers.
Para los Vikings las posibilidades de postemporada se ven lejanas por completo, en el último lugar de la NFC Norte, dominada por los Green Bay Packers y Chicago Bears, que se enfrentan el lunes por la noche.
"Mis estadísticas personales son secundarias", sentenció. "En especial cuando estás 1-7, en realidad no importan las yardas. Preferiría haber ganado sin avanzar una sola.
"No quiero correr para 2 mil yardas y estar sentado frente a mi televisión para ver a los demás jugar en los playoffs".
Peterson tuvo a más de 40 invitados entre familiares y amigos, así como ex compañeros de la Universidad de Oklahoma, localizada a unas 200 millas del AT&T Stadium de Arlington.