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La odisea de Seguel en Madrid

Daniela Seguel vivió un momento complicado en el Aeropuerto de Barajas, en Madrid. ITF Poitiers

BRUSELAS -- Fueron doce horas de zozobra e incertidumbre. Aislada de sus pertenencias y separada de su compañera de viaje, Daniela Seguel (280ª de la WTA), la número uno de su país, atravesó un momento difícil en el Aeropuerto de Barajas. Su viaje a Bélgica, para sumarse a la academia de Justine Henin, acarició un final abrupto en Madrid, donde estuvo a punto de ser deportada por haber estado más de 90 días consecutivos el año pasado. En ESPNtenis.com, la chilena cuenta su odisea.

"Comenzamos (junto a Cecilia Costa) nuestro viaje el miércoles y llegamos a Madrid el jueves por la mañana. Ahí, en emigraciones, nos retuvieron los pasaportes por haber llevado más del tiempo que corresponde en 2013. A pesar de que dijimos que éramos tenistas y que estábamos por motivos de torneos y entrenamiento, nada de eso ayudó para que nos dejaran pasar", cuenta Seguel, en el inicio del contacto, ya más tranquila, desde Bruselas.

"Tuvimos que esperar dos horas hasta que llegaron los policías que se encargaban del tema. Ahí fue que nos comunicaron y explicaron bien el porqué de la retención. Luego de un rato nos dicen que había malas noticias para mí, ya que estaba pasada en el tiempo y me iban a tener que devolver a Chile ese mismo día. Cecilia, en tanto, podía seguir hacia Bélgica ya que todavía le quedaban 34 días", continuó la chilena, que el último año subió 150 puestos en el ranking, jugó una final de un 25K en Francia y tuvo un notable triunfo ante Virginie Razzano (92ª y ex16ª) en el 100K de Poitiers.

- ¿Te cambiaron de sala al suceder eso?
- Ahí nos separaron. Yo me fui a una sala aislada donde había más gente con estos problemas y que serían deportados. Ahí no pude tener acceso a mi celular ni a nada electrónico. Sólo estaba con lo puesto y mi billetera. Teníamos teléfonos públicos para poder comunicarnos con nuestros familiares y había un número donde ellos nos podían llamar cada vez que quisieran. En esos momentos tenía mucho nerviosismo porque era un tema complicado y que nunca me había pasado. Además estaba un poco deprimida ya que sentía que iba a dar un paso atrás al no poder estar preparándome en Europa. Había viajado con mucha ilusión.

- ¿Te ibas enterando cómo iba el tema afuera?
- Sabía que desde Chile estaban haciendo las gestiones, ya que mi familia y mi entrenador me iban comunicando un poco eso, pero nada más allá. Igual yo estaba con muy poca fe de que eso se pudiera solucionar, ya que lo policías no me daban muchas esperanzas. Me decían que no había chances de que me dejaran pasar porque tenía la visa denegada y que me deportarían en el primer vuelo, que era a las 12 de la noche.

- ¿Cómo fue ese tiempo en la otra sala?
- Fue una estadía bastante aburrida también, ya que ni siquiera podía tener algo para escuchar música. Aparte fueron muchas horas, dado que estuve hasta las 6 de la tarde retenida. Ahí fue cuando un policía me dice "Daniela, agarra tus cosas que nos vamos". Ahí mi pensamiento fue que me llevaban al avión para Chile, pero me dijo que me dejarían pasar y seguir mi camino hacia Bélgica.

- ¿Cómo tomaste la buena novedad?
- Fue una sorpresa muy grande. Me trajo más calma. Ahí cambié el pasaje y pude viajar el viernes en la mañana hacia Bélgica. Gracias a Dios sólo quedó en una anécdota. Estoy muy agradecida al gobierno español y al chileno, al consulado, el ministro, la federación, mi entrenador, familias, periodistas y todos los que aportaron para que este problema se solucionara.

Pasado el mal momento, Seguel se dirigió hacia Bruselas, donde ya la esperaba Costa, para su segunda experiencia en la academia de Henin, exnúmero uno del mundo. "Con Justine ya tuve la posibilidad de compartir y entrenarme el año pasado, lo que fue una experiencia única para mí. Espero repetirla ahora", destacó la fanática del fútbol y de Colo Colo.

"Llegamos a la academia junto a mi entrenador Juan Pablo Abarca, que es la principal razón por la cual podemos estar acá. Estaremos unos dos meses, ya que debemos volver para competir en los Juegos Odesur. De ahí volvemos a Europa. Estaremos la mayor parte del tiempo acá, entrenando y compitiendo", contó sus próximos pasos en ESPNtenis.com. "Lo más importante para ese año es seguir elevando mi nivel. Buscaré jugar las clasificaciones de los Grand Slams y terminar como Top 150", agregó.

- ¿Lo realizado por Paula Ormechea y Teliana Pereira sirve como espejo?
- Obvio que lo hecho por ellas dos ha sido muy bueno y son una estimulación para las que venimos desde atrás. Espero pronto estar en ese mismo nivel. Estoy muy motivada para este año.

- Hace unos meses Cecilia Costa contó en ESPNtenis.com de los problemas que atravesaba para costear su carrera, ¿cómo es tu situación?
- El aspecto económico siempre es un tema. Hoy el que me ayuda a financiar mi carrera en mayor parte es mi hermano Andrés junto a mi familia. También ahora recibimos apoyo de ADO (Asociación de Deportistas Olímpicos de Chile) para poder viajar en esta primera parte hacia Europa, pero no tenemos más financiamiento lo cual no es muy bueno para lo que queremos, ya que pasaremos todo el año acá, en Europa. Espero que pronto pueda salir algún sponsor, lo que facilitaría los avances. Nos falta mucho apoyo todavía.

Pasada la odisea, convertido en sólo una anécdota, Seguel sigue su camino. Con el Top 150 en la mira y con los Juegos Odesur y la Fed Cup como otros grandes objetivos, la chilena se lanza por un 2014 lleno de éxito. Ahora, en Bruselas, donde debía estar.