BUENOS AIRES -- Como es habitual, en ESPNtenis.com repasamos las historias paralelas de la semana tenística. Detalles, curiosidades, frases destacadas y todo el color del circuito.
Wozniacki, motivada; Serena Williams, no tanto...
La vida le sonríe a Caroline Wozniacki. En Dubai, la ex-número uno del mundo acababa de vencer a Sabine Lisicki por 2-6, 6-3 y 6-3 y se mostraba bien contenta en conferencia de prensa. "Estoy tan emocionada, es un momento tan emocionante", dijo la danesa. Era extraño, pero quizás se trataba de que su remontada empezó en el 2-6, 0-1 y 0-40... o no.
Lo cierto es que su satisfacción tenía que ver con que está próxima a casarse con Rory McIlroy, golfista norirlandés ganador de dos majors. "No hemos fijado la fecha", admitió, sin estar dispuesta a decir más detalles. ¿Este año? "Nunca se sabe", respondió ella, 100% alegre.
Wozniacki fue más expresiva cuando se le preguntó si ella juega mejor al golf que él al tenis. "Yo era mejor golfista, pero ahora no, porque en pretemporada él estuvo jugando todos los días. No es justo", contaba con confianza. "Comencé a golpear decente después de jugar un par de semanas, pero luego no jugué por cuatro meses, y al volver estoy en cero".
Distinto era el ánimo de Serena Williams, a punto de volver a la actividad desde su eliminación en el Abierto de Australia, donde sufrió problemas físicos: "Mi espalda comenzó a sentirse mejor, pero no fue el mejor tiempo de preparación para volver en Doha en el nivel que me gustaría", se excusaba previo al debut en Dubai, luego de ausentarse en Qatar.
Nivel al margen, había otra realidad para ella. "Se vuelve aburrido tener que entrenar todos los días. Vivía pensando: 'yo no quiero practicar más. Quiero jugar un partido' ". Finalmente, cayó en semifinales ante Alize Cornet y con mucho por mejorar... quizás sea la motivación.
Los consejos de la abuela
"Creo que estoy hablando como una anciana que da consejos a todo el mundo". La frase salió de una joven jugadora, de 24 años recién cumplidos, pero que posee ranking WTA desde hace diez temporadas y que supo alcanzar su punto más alto en 2009. Si se busca referencia para las flamantes apariciones en el circuito, como Sloane Stephens y Eugenie Bouchard, ella es la indicada. Y lo sabe. Por eso, la misma Cornet, ex N°11 del mundo, se prestó al juego en Dubai.
"Genie es una gran jugadora. Es mucho más profesional de lo que yo era con 19 años. Yo estaba loca por todas esas cosas. Tomé como algo normal ganar muchos partidos, dinero y subir en el ranking. Y no es la forma, porque lo que me pasó fue increíble, extraordinario. Por eso le diría que sólo tiene que disfrutarlo y seguir trabajando, porque nada es seguro", remarcó Cornet en conferencia de prensa, tras ser consultada sobre qué consejo le daría a la canadiense, N°19 del mundo y que este martes cumplirá 20 años.
La francesa, ante el requerimiento, también habló de la actualidad de Sloane Stephens, quien hizo su explosión el año pasado y por el momento, si bien no ha logrado escalar al Top 10, se ha podido mantener cerca de la elite. "A veces me recuerda a mí, ya que a veces se la ve un poco cabizbaja y con menos confianza. Pero ella está entre las 20 del mundo. Solo debe seguir trabajando y hacer las cosas sencillas. Eso es todo. Entrenarse y seguir creyendo en uno", señaló la finalista de Dubai, actual N°23 de la WTA.
De tanto hablar de las nuevas generaciones, Cornet tomó coraje y puso su situación sobre la mesa, siempre con una sonrisa. "Todavía soy joven. Antes era un bebé. Ahora soy joven", redobló la apuesta la francesa, quien aclaró que "ahora soy más madura y tengo más experiencia, por lo que mi tenis es diferente. Creo que es incluso mejor que antes. Estoy feliz de estar de vuelta a este nivel, ya que fue difícil cuando caí en el ranking", dijo Cornet, quien cerró el 2011 en la 89ª posición.
Las prioridades de Llodra: capítulo II
Los años no vienen solos. El francés Michael Llodra, que en mayo cumplirá 34 años, le presta mucha atención a su físico. Así lo había dejado en claro en Wimbledon 2013 cuando abandonó en singles, por una lesión en un isquiotibial, y unas horas después estaba jugando dobles. "Me duele todos los días. Hizo que me bajara de Queen's, incluso. En dobles es más fácil, juegas en media cancha y sabía que teníamos una buena posibilidad de ganar rápido", había dicho el galo en su momento.
Lo cierto es que hoy, siete meses después, la historia pasó a ser otra, con el single por sobre el dobles. Claro, cuatro factores, entre otras, fueron determinantes: la sede del torneo, sus resultados en las semanas pasadas, su despedida del evento y un espectador especial.
Que el evento fuera en Francia pasó a cobrar importancia. Pero más aún que Llodra haya ganado hace unos días el ATP 500 de Rotterdam junto a Nicolas Mahut, que significó el primer título para esta dupla y que los puso en carrera de cara a uno de los objetivos que no pudieron lograr el año pasado: el ingreso a las Finales ATP.
"Esta semana mi prioridad es el singles", le decía Llodra al sitio La Provence poco después de su victoria en primera ronda y tras haberse bajado sin jugar en el cuadro de dobles. "Es el último torneo bajo techo de la gira, así que voy a tratar de jugar bien dado que en Montpellier no pude estar pleno porque después de Australia tuve una gripe. Siempre es agradable jugar ante el público francés. Trataré de dar lo mejor", marcó.
Además, no quiso decepcionar en su despedida en el ATP de Marsella. "Lo anuncié el año pasado, por lo que esta será mi última vez acá, pero no estoy aquí para hacer una gira de despedida". Y hubo más razones, porque también contó con una visita particular: su hijo aprovechó sus vacaciones escolares en París y se trasladó hacia el torneo para verlo jugar. "Será un buen recuerdo para más adelante", dijo Llodra, quien no pudo ir mucho más allá y terminó siendo eliminado en cuartos de final a manos de Jan-Lennard Struff.
Un ex-Top 100 que gana Futures.. pensando en la nueva generación
Otro experimentado francés que vive momentos especiales es Eric Prodon. El francés de 32 años estuvo 15 meses sin poder servir, culpa de una lesión en el codo. Por eso, regresó al circuito profesional recién en octubre, sin ranking y en el nivel más bajo: en Futures en Estados Unidos, donde alternó derrotas tempranas con dos finales. "No puedo esperar jugar mi mejor tenis y encontrar el ritmo en el primer torneo", comentaba al medio L'Équipe en su regreso. "Debo aceptar que tengo que pasar por estos momentos de incertidumbre y jugar de nuevo con diferentes sensaciones a las que solía tener".
Pero la última semana, llegó la primera gran satisfacción. En el Future de El Salvador, destino muy acostumbrado para dar saltos, venció en la final al colombiano Michael Quintero, para volver a meterse entre los 650 primeros del ranking mundial. Lejos del 83º que supo ocupar en 2011 (con 3 títulos Challengers en esa temporada), resta saber hasta dónde llegará la remontada de quien tiene un triste récord de 1-11 en torneos ATP.
"A largo plazo, voy a seguir vinculado al tenis y compartir mi experiencia con esta nueva generación. Me encanta el tenis y me encanta ayudar, así que haré mi mejor esfuerzo en el día en que llegue ese momento", pase lo que pase con su físico, ya mira de reojo al momento del adiós.