NUEVA YORK (AP) -- Colombia se revalorizó a tiempo. Honduras está en plan sigiloso. Estados Unidos avanzó a media máquina. Y Panamá es la gran revelación.
Así se plantean las semifinales de una Copa de Oro, que se asemeja a una caja de Pandora por sus inesperados resultados.
Las semifinales serán el jueves en el estadio Giants de Nueva Jersey, con Estados Unidos-Honduras a primera hora y Colombia-Panamá en el duelo de fondo. El mismo escenario hará de sede para la final del domingo.
El partido que librarán colombianos y panameños tendrá la peculiaridad de ofrecer una reedición del encuentro que protagonizaron en la fecha inaugural de la competición. En esa ocasión, Panamá dio su primer campanazo del torneo, cuando derrotó 1-0 a Colombia.
Pero ha mucho ha transcurrido desde entonces.
Colombia perdió otro partido por 2-1 ante Honduras y se clasificó a los cuartos de final como uno de los dos mejores segundos.
Los bonos colombianos, el invitado sudamericano al campeonato de la CONCACAF, estaban por el suelo y no se intuía que serían capaces de dejar en el camino a México, el actual monarca.
Pero Colombia encontró a tiempo su jerarquía para dejar en el camino a un desdibujado México con una victoria 2-1, labrado con un fútbol sencillo pero práctico.
"Ahora el torneo se pone diferente, ahora hay que tener el control mental para saber asimilar este paso y saber de que quedan juegos importantes por delante", declaró el técnico de Colombia Reinaldo Rueda.
Colombia trajo un equipo tildado como el "B", sin sus principales figuras más importantes, como el defensor Iván Ramiro Córdoba y el atacante Juan Pablo Angel, prefiriendo guardarlos para las eliminatorias del mundial.
No obstante, los colombianos aparecían en la lista de candidatos y sus dos tropiezos iniciales sorprendieron.
En teoría y por antecedentes, Colombia y Estados Unidos parte con el favoritismo a su favor para las semifinales, pero nadie se atreve a recoger el guante.
"En esta semifinal todos los equipos tienen méritos, tienen argumentos para estar en la final y creo que cualquiera que sea debemos de respetarlo", advirtió Rueda.
Entreverarse entre los cuatro semifinalistas ya es algo grande para la modesta historia del fútbol panameño, en apenas su segunda intervención en la Copa de Oro. En la otra, en 1993, Panamá no pasó de la primera ronda y sólo cosechó un punto.
Pero Panamá ha venido subiendo en los últimos tiempos. Su selección mayor por primera está disputando la fase final de las eliminatorias de la Copa Mundial en la CONCACAF y sus equipos Sub20 se clasificaron a los más recientes mundiales juveniles.
Su técnico José Hernández, de nacionalidad colombiana, dice que los logros de Panamá, en la palestra tras derrotar a Sudáfrica en una definición de penales en los cuartos de final, no son producto de la casualidad.
"Realmente no me sorprende, porque ha habido un proceso", afirmó. "Es mérito de los jugadores que han ido entendiendo que el fútbol se pueda tambien desarrollar en Panamá, que somos los pioneros del fútbol en Panamá".
La semifinal entre Honduras y Estados Unidos será un duelo de equipos invictos, además de ser los más goleadores del torneo.
Estados Unidos, que busca su tercera corona, tiene una cosecha de nueve goles y despachó 3-1 a Jamaica en los cuartos de final. Honduras, que eliminó 3-2 a Costa Rica, contabiliza siete.