Crece la preocupación en el Miami Open luego de que las cámaras captaran a Novak Djokovic (5° del ranking ATP) con un ojo hinchado mientras entrenaba en la previa de la final versus Jakub Mensik (54°) de República Checa. Los detalles.
Durante este domingo lluvioso, el serbio, de 37 años y seis veces proclamado en el evento, arribó a las instalaciones del Masters 1000 de la Florida, Estados Unidos, con unos lentes de sol que nada hicieron sospechar en un principio.
Sin embargo, en su arribo a la pista de entrenamiento, una imagen alarmante captó la atención de todos, sembrando la duda sobre su estado para disputar el decisivo encuentro frente a una de las máximas promesas del Tour en el Hard Rock Stadium: su ojo derecho visiblemente hinchado.
Tomado al detalle por las cámaras de la transmisión, se observó también que el nacido en Belgrado, quien sueña con su 100° título en el circuito masculino, pausó el peloteo con su equipo para dirigirse hacia el banco a aplicarse unas gotas en la zona en cuestión.
Pese a que no han trascendido detalles provenientes del entorno del protagonista, periodistas especializados apuntan a que podría tratarse de un orzuelo o conjuntivitis, teniendo en cuenta que días atrás, en su última presentación contra el búlgaro Grigor Dimitrov (15°), había aparecido con una pequeña hinchazón debajo de ese mismo ojo.
Esa molestia no impidió que el ex número 1 del planeta y múltiple campeón de Grand Slam hiciera de las suyas, sorprendiendo al salir a secar la cancha después de la intensa lluvia que afectó la actividad programada.
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