LONDRES -- Otra vez la lluvia como protagonista en Wimbledon. Roger Federer, Nº3 del mundo, fue el único varón en meterse en octavos de final al derrotar al británico Daniel Evans (91º) por 6-4, 6-2 y 6-2. Al no ser programado en la cancha central, bajo techo, Novak Djokovic (1º) no pudo terminar su partido, en el que caía 7-6 (6) y 6-1 con el estadounidense Sam Querrey (41º en el ranking y 28º cabeza de serie). Este encuentro, como otros, fue postergado para el sábado.
Federer viene de faltar al Abierto de Francia pero reponerse de una lesión en la espalda y luego hizo semifinales en pasto en Stuttgart y Halle. Se quedó con la espina en ambos casos y ahora busca el desafío de poder volver a obtener un Grand Slam. El 17º y último lo consiguió justo en Wimbledon, en 2012, un récord que mantiene en pie y quiere ampliar, a poco de cumplir 35 años.
El suizo es uno de los máximos ganadores en Londres, con siete títulos, y eso le juega a favor a la hora de toparse con cada rival, por el respeto que le tienen. Este viernes volvió a medirse con un local, al que jamás había enfrentado en el circuito, y se impuso sin problemas, apoyado en su servicio y la velocidad de su derecha.
Con el primer quiebre del partido, en el primer set, empezó a llegar el principio del fin para el dueño de casa. Es que Federer empezó a administrar esa diferencia y, con dos rompimientos en los sets siguientes, selló un triunfo claro, merecido, para volver a avanzar a la cuarta rueda en el mítico césped del All England.
Este triunfo lo mantiene aún más firme en la cima de los tenistas activos con más alegrías en césped, ya que a sus ocho títulos (ocho en Halle y siete aquí) ahora le agregó llegar a los 150 en esta superficie.
En octavos, su siguiente adversario será el estadounidense Steve Johnson (29º), que viene de lograr su primer ATP, en Nottingham, o el búlgaro Grigor Dimitrov (37º; ex-Top 10). Apenas disputaron siete juegos y estaba 4-3 arriba el primero, en choque que continuará este sábado.
En cambio, el que no la pasó bien el viernes fue el indiscutido líder del circuito ATP, que viene de convertirse, con su primer título en Roland Garros, en el primer hombre en lograr cuatro grandes torneos en fila y va por más. En busca de igualar la segunda mejor racha invicta en Majors, de 31 triunfos, debe cuidarse del gran sacador y agresivo Querrey, quien llegó a octavos en Londres en 2010.
De hecho, el estadounidense, con la potencia de su saque y versión agresiva, tomó ventaja de 2-0 en sets, lo que sorprendió a todos. Tras perder con lo justo el primer parcial en la muerte súbita, el serbio pareció sentir el golpe en el rubro anímico y fue inesperada su caída rápida en el segundo. Sin dudas, necesitará recuperar su habitual solidez y afirmarse desde su gran devolución.
Djokovic dueño de tres coronas en el mítico césped del All England, va por el 17º éxito seguido en este certamen, ya que tras su coronación en 2011 se impuso en 2014 y 2015. Por eso, más allá de sus rachas y su genial presente, necesita volver a rendir muy bien en el único torneo del año que disputa en pasto.
El Nº1 del circuito lidera 8-1 el duelo personal contra el estadounidense, con apenas dos sets cedidos en sus ocho victorias, sin contar, claro, lo que jugaron este viernes en Londres. En tanto, Querrey lo eliminó inesperadamente en la apertura del Masters 1000 de París en 2012, luego de recuperarse de un mal inicio. Un dato a tener en cuenta: el número uno le ganó cuatro sets por 6-0.
De avanzar, el rival del serbio en octavos de final será un francés, que sale del partido entre Nicolas Mahut (51º), especialista en césped, y Pierre-Hugues Herbert (81º). El primero tomó ventaja de 2-0 en sets y parece encaminarse a otra victoria.