NUEVA YORK -- El remontar el marcador en un partido de playoffs se ha convertido en el pan de cada día para los Kansas City Royals.
En su victoria 5-3 sobre los Mets de Nueva York la noche del sábado, Kansas City obtuvo su séptimo triunfo remontando el marcador esta postemporada, y por tercera ocasión en cada una de sus tres victorias en la Serie Mundial.
La octava entrada volvió a ser un punto fuerte para los Reales, que han anotado 22 carreras en dicho inning, liderando ampliamente a todos los demás equipos en la postemporada.
“Para nosotros nunca se acaba el juego, siempre tenemos chance de hacer carreras y aprovechamos cada momento, como hicimos hoy también, que vinimos de atrás”, dijo el campocorto venezolano Alcides Escobar. “Siempre batallamos hasta el final. Nadie quiere ganar en esa situación viniendo de atrás en el octavo inning, pero las cosas nos están saliendo así”.
Los Reales han ganado seis juegos de playoffs en los que han tenido una desventaja de múltiples carreras, igualando el récord establecido por los Yankees de Nueva York en 1996 para la mayor cantidad en una sola postemporada, según Elias Sports.
Kansas City además ha anotado 44 careras de la séptima entrada en adelante, mientras que se han combinado para 39 carreras en los primeros seis episodios.
“Nunca nos vamos a rendir, nunca ponemos la cabeza abajo”, dijo el receptor Salvador Pérez, quien se fue 4-3 con un doble y una carrera impulsada y una anotada.
“Llegamos con energía y venimos a competir y a batallar, porque esto no se ha acabado, y eso fue lo que hicimos hoy”, agregó el venezolano, que ha conectado de hit en 9 de sus 11 juegos de por vida en Serie Mundial, bateando para .366, con tres dobles, un jonrón y cinco carreras impulsadas y seis anotadas.
El jardinero puertorriqueño olvidó el número de outs en la parte baja de la tercera entrada y permitió que el campocorto Wilmer Flores anotara fácilmente desde tercera base en un elevado de sacrificio, aunque Ríos estaba perfectamente posicionado para al menos forzar una jugada cerrada en el plato.
El relevista Danny Duffy le permitió el segundo cuadrangular a Conforto en la quinta entrada, para convertirse en el segundo novato de los Mets con dos jonrones en un partido de Serie Mundial después que fue logrado por el inmortal Gary Carter en Fenway Park en 1986.
No obstante, después de la carrera permitida por Duffy, Luke Hochevar, Ryan Madson y Wade Davis se combinaron para cuatro entradas en blanco para darles la oportunidad de que los bates de los Reales hicieran lo suyo en la octava entrada contra el taponero dominicano Jeurys Familia.
Davis lanzó dos entradas en blanco para sumar su cuarto salvamento en igual número de oportunidades esta postemporada, donde ha lanzado 9 innings y dos tercios en blanco y ha permitido sólo cinco imparables con tres bases por bolas y 15 ponches.
“Es emocionante lo que puede lograr Davis, que es uno de los mejores cerradores del béisbol”, dijo el tercera base Mike Moustakas, quien conectó el hit de la victoria contra Familia al darles la ventaja 4-3 a los Reales en la parte superior de la octava entrada.
“Es bueno saber que puede entrar y anular a los bateadores durante dos innings. Eso no es fácil de hacer. No es fácil conseguir seis outs contra una gran alineación como esa”.
Es la 46ma ocasión en la historia de la Serie Mundial que un equipo toma una ventaja de tres juegos a uno. En las 45 ocasiones anteriores, el equipo líder ha ganado la serie 39 veces, pero eso no significa que los Reales se van a confiar para el quinto partido la noche del domingo.
“Siempre he dicho que la pelota es loca y todo puede pasar”, sentenció Pérez, reiterando que aún no se ha ganado nada. “Vamos a hacer todo lo posible y a trabajar duro a ver si ganamos”.