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Cinco managers que ya están en la silla caliente

Para el manager de los Rojos Bryan Price y para el de los Azulejos John Gibbns, es ganar ahora o irse a casa. USA TODAY Sports

Cada año, escribo sobre los managers que están en la "silla caliente". Y cada año me recuerda lo injusto del béisbol y como son tratados los managers. Usualmente, los managers son despedidos porque su equipo no está luciendo bien, y la mayoría del tiempo no es su culpa, sino una realidad del negocio. En un negocio de $10 mil millones, alguien tiene que ser señalado como responsable cuando las cosas no van bien, y usualmente es el manager el que es señalado inicialmente.

He aquí mi lista de los managers en la silla. Caliente, estos no son los managers que yo pienso que deberían estar en la silla caliente, sino los que la industria me ha dicho que lo están. El año pasado, yo hice una lista de seis managers en la silla caliente, y como pueden ver, cinco de ellos han sido despedidos o han entregado su renuncia.

Los Bravos ya despidieron a Fredi González, así que antes de que se haga el siguiente cambio en la dirección de un equipo, les ofrezco mi más reciente pieza sobre cuáles managers tienen las mayores probabilidades de perder sus empleos - ya sea durante la temporada regular o al final del año:

1. Bryan Price, Rojos de Cincinnati

Price fue el único manager en sobrevivir mi lista de la "silla caliente" de hace un año, pero dudo mucho que vaya a sobrevivir esta temporada. Ha logrado mantenerse en el puesto mayormente porque él fue la última contratación de manager que hizo el presidente de operaciones deportivas de los Rojos Walt Jocketty, quien ascenderá de nivel al final de la campaña. El gerente Dick Williams tendrá la palabra final en las operaciones deportivas al final de la temporada, y la expectativa es que traiga su propio manager mientras los Rojos siguen su proceso de reconstrucción. Pero Price no se quedará sin trabajo por mucho tiempo, ya que es considerado como un gran coach de pitcheo en Grandes Ligas, y con toda probabilidad volverá a esa posición con un equipo diferente en 2017.

2. Brian Snitker, Bravos de Atlanta

Snitker recibió el sello de interino por una razón, y aunque se le está dando la oportunidad de ser el manager en propiedad, es altamente improbable que pueda probar mucho dirigiendo el peor equipo en las Grandes Ligas. La siguiente contratación de los Bravos será extremadamente importante para el futuro del gerente John Coppalella, así que él se va a tomar su tiempo para asegurarse de conseguir el mejor candidato posible. Entre los favoritos iniciales están: Bud Black, asistente especial del gerente con los Angelinos de Los Angeles; Torey Lovullo, coach de la banca de los Medias Rojas de Boston; y Alex Cora, analista de Baseball Tonight y Béisbol Esta Noche de ESPN. Los Bravos dirán que le van a dar seria consideración a algunos de sus entrenadores en el equipo grande, tales como Bo Porter y Terry Pendleton. Pero seamos realistas: Si fueran a contratar a alguno de ellos, lo habrían hecho en lugar de Snitker. Esperen que Snitker se mantenga en la organización como parte instrumental del departamento de desarrollo de jugadores de Atlanta.

3. Walt Weiss, Rockies de Colorado

Weiss por poco pierde el puesto el año pasado, pero el gerente Jeff Bridich decidió darle un año más luego que Weiss lograra convencerlo de que están filosóficamente en la misma página. Sin embargo, si los Rockies no muestran mucha mejoría en el resto de la temporada, Weiss se quedará sin empleo y Bridich traerá a su propio candidato por primera vez desde que asumió el puesto de gerente hace dos años. Weiss ha hecho bien las cosas aprendiendo sobre la marcha. Nunca ha tenido miedo de levantar el teléfono para recibir consejos de otros managers que están en el Salón de la Fama tales como Tony LaRussa, y él siempre está aprendiendo y estudiando para ser mejor. Ha hecho un buen trabajo con sus alineaciones, con sus habilidades para comunicarse y enseñar, y siempre ha contado con el respeto de sus jugadores. Sin embargo, como todos los ex managers de los Rockies, Weiss ha sido retado en su manejo del cuerpo de lanzadores.

4. Brad Ausmus, Tigres de Detroit

La silla de Ausmus es probablemente la más caliente de todas y así ha sido desde que fue contratado en Detroit. Además é les uno de los managers más inteligentes, más calmados y con mayor carácter en el juego. Casi pierde el puesto el año pasado antes de que el gerente Al Avila decidiera quedarse con él tras largas deliberaciones. El estatus de Ausmus para este año es simple: O llegas a la postemporada o te vas a casa. El dueño de los Tigres Mike Illitch sigue abriendo su chequera para mejorar el equipo, incluyendo el contratar a su mejor abridor, Jordan Zimmermann, y al jardinero izquierdo Justin Upton en la temporada baja. Illitch espera ganar, y si los Tigres no lo logran este año, Ausmus se quedará sin empleo. La buena noticia es que los Tigres tienen una de las mejores y más profundas alineaciones en el béisbol, ellos son fuertes a la defensa en el medio, Justin Verlander está luciendo como el Verlander de siempre, y Michael Fulmer ha mostrado lo suficiente como para apropiarse de un puesto permanente en la rotación de abridores. Conclusión: Si los Tigres tienen suficiente pitcheo, ellos deberían entrar a la postemporada como campeones divisionales o como comodín. Si no lo logran, Ausmus será señalado como responsible por no tener suficiente pitcheo y por su ocasional titubeo al manejar el cuerpo de lanzadores. ¿Es justo? Probablemente no, pero así es el béisbol. Si es despedido, conseguirá otra oportunidad rapidamente para ser manager.

5. John Gibbons, Azulejos de Toronto

¿Cómo ha pasado Gibbons de llegar a la Serie de Campeonato de la Liga Americana a la silla caliente en apenas una temporada? Simple: un cambio en la cima. Mark Shapiro entrando como presidente y tomando las riendas como gerente han establecido un futuro a largo plazo para la oficina central. Shapiro y Atkins heredaron a Gibbons y han hecho el mejor trabajo que pueden para trabajar con él y que se sienta respetado y querido. Ellos han provisto información detallada para ayudarlo, pero además le han dejado solo para que tome las decisiones como manager. Sin embargo, seamos claros: A los presidentes y los gerentes siempre les ha gustado contratar sus propios managers. Es la relación a largo plazo más importante para cualquier equipo de Grandes Ligas. Los Azulejos son lo suficientemente buenos como para ganar el Este LA, o por lo menos para quedarse con uno de los puestos de comodines, pero ellos también están en la misma división que dos equipos muy mejorados, los Medias Rojas y los Orioles de Baltimore. Gibbons ha hecho un excelente trabajo para Toronto, pero con una nueva administración, se trata de ganar y entrar a la postemporada o te vas a casa.

Esperemos que mi lista no sea tan certera como fue la de 2015.