BEREA -- Asignada para cubrir a los mejores receptores abiertos de la NFL cada semana, el esquinero de los Cleveland Browns, Joe Haden, conoce de retos.
Está lidiando con el reto más complicado a la facha.
Haden espera estar listo para la temporada que viene después de someterse a una cirugía en el tobillo, la que llegó tras perderse 11 partidos por una serie de lesiones, incluyendo una conmoción que lo obligó a cuestionarse su futuro en el fútbol americano. Este miércoles, Haden, quien finalmente ha dejado la bota protectora y muestra progreso, dijo que los últimos meses han sido difíciles.
"Realmente nunca que enfrentar ningún tipo de adversidad como ésta jugando al fútbol americano", explicó el ex jugador de Pro Bowl. "Siempre ha sido bastante bueno. Simplemente poder atravesar algo como esto, definitivamente encuentras nuevo respeto, pasión".
Haden cree que hay buenos días por delante, tanto para él como para los Browns. Se ha visto recargado por el nuevo entrenador en jefe Hue Jackson y está emocionado por verse reunido con el coordinador defensivo Ray Horton, quien está de vuelta en Cleveland. El siempre animado Haden no está seguro si estará listo para el campamento de entrenamiento en julio, pero está confiado de que no se perderá nada de la campaña regular del 2016.
Mientars tanto, el proceso de sanación no ha sido sencillo para Haden, quien no puede esperar a regresar al campo.
"Lo estoy extrañando", dijo el esquinero. "Simplemente no ser capaz de estar allá con los demás, a veces sintiendo como que estorbo un poco, simplemente no me gusta esa sensación para nada, sabiendo que soy un líder de este equipo y una persona que tendrá gran impacto dependiendo de victorias y derrotas, así que estoy realmente emocionado por seguir empujando".
Esta semana, Haden fue capaz de deshacerse de la bota y la motoneta que le ayudaba a trasladarse. Ha sido un proceso lento para el back defensivo de 27 años de edad, quien inicialmente se lastimó el tobillo izquierdo el 1° de noviembre ante los Arizona Cardinals. Ocurrió mientras realizaba una tacleada a lo largo de las laterales en un partido en el que Haden había sufrido su lesión a la cabeza, la que lo marginó de los ocho partidos finales de Cleveland.
Mientras entrenaba durante la temporada baja, se agravó la lesión de tobillo y requirió la operación.
"Estoy lidiando con ello bastante bien", señaló Haden. "Tengo una actitud realmente positiva. Un nuevo grupo de entrenadores, el coach Hue Jackson, él estando allí, teniendo fe en mí, confiando en mí y creyendo en mí, sabiendo qué clase de jugador soy, sin tener la sensación de tener que probar lo que puedo hacer.
"Simplemente tener esa confianza me da mucha confianza en mí mismo. No me hace sentir como que hay todo un grupo nuevo ante el cual me debo probar. Jugamos ante Cincinnati antes. Él sabe lo que puedo hacer".