En promedio, hay seis o siete cambios de entrenador en jefe por año en la NFL. Para el 2016, serán Ben McAdoo, Chip Kelly, Adam Gase, Dirk Koetter, Doug Pederson y Hue Jackson los nombres nuevos al frente de franquicias de la NFL, grupo que mantiene el promedio de la última década.
El constante cambio que existe anualmente en la posición obliga a mantener los ojos puestos sobre futuros candidatos potenciales. Uno de los nombres recurrentes en esta categoría pertenece a Jimbo Fisher, actual entrenador en jefe de los Florida State Seminoles.
"Amo el [juego] colegial, y he tenido oportunidades de saltar al juego profesional como asistente y como coordinador, y he generado interés como head coach", admitió Fisher en entrevista con The Palm Beach Post la semana pasada. "Debe ser la organización correcta en el momento correcto y la situación correcta si alguna vez te interesa. Tengo una gran situación donde me encuentro. [La NFL] no es algo que me mueva".
Fisher, quien ha conquistado tres títulos de la ACC y un campeonato nacional en seis temporadas como entrenador en jefe de FSU, está en medio de un contrato que le pagó 5.15 millones de dólares en el 2015 --sin contar bonos--, y que le podría redituar en hasta 44 millones de dólares a lo largo de la vida del convenio, el cual cubre hasta el término de la campaña del 2022. Ese salario lo colocó como el quinto head coach mejor pagado de la NCAA el año pasado.
En el 2015, el salario promedio para los head coaches de la NFL fue de 4.851 millones de dólares.
Fisher, no descuenta dar el salto a la NFL en algún momento, aclarando al diario que "nunca se puede decir nunca en este negocio", pero hay una serie de factores que se tendrían que reunir para que ello suceda.
"Un gran propietario, un gran gerente general, organización", enumeró Fisher. "Todos son puntos muy críticos. Además, en la liga más te vale contar con un quarterback. En todas las ligas lo necesitas, pero definitivamente lo necesitas allá arriba".
Sin un salto a las filas profesionales en planes inmediatos, Fisher reconoce la importancia de ser considerado como candidato potencial.
"Esperamos seguir haciendo un gran trabajo, y si más personas te quieren, significa que estás haciendo las cosas bien en tu universidad", señaló Fisher. "Para mí, solamente enaltece nuestra marca y lo que estamos haciendo en Florida State".