MINNEAPOLIS -- La percepción popular en torno a la defensiva de los Minnesota Vikings es que el equipo depende sobre todo de cobertura personal de presión, empleando esquineros físicos que redirigen a los receptores en la línea de golpeo. Si ese fuera completamente el caso, la transición al esquema de Mike Zimmer para tanto Xavier Rhodes como Trae Waynes podría haber sido más simple, y quizás no hubiera requerido tanta atención del head coach como han recibido ambos esquineros en el inicio de sus carreras.
En realidad, pese a que Zimmer prefiere esquineros más altos que pueden romper la sincronía entre los pasadores y sus objetivos, los Vikings usan un esquema más complejo de principios de zona y cobertura personal campo abajo. Los Vikings piden a sus esquineros que presionen en ocasiones, pero pasan bastante tiempo con sus defensivos jugando alejados de los receptores. Eso es parte del juego que necesitaba dominar Waynes en su campaña de novato que sirvió sobre todo como un tutorial para él, y es donde Waynes debe mostrar a Zimmer el progreso que ha visto en Rhodes.
"Lo que hay con él y Xavier aquí es que pueden jugar cobertura de presión personal, lo que es probablemente la fortaleza de Trae", dijo Zimmer. "Así que como Xavier, su fortaleza siempre fue la cobertura de presión personal. Es la primera primavera en donde siento que realmente ha mejorado en la cobertura con colchón, así que es un poco parecido con Trae. Creo que cuando ingrese allí y empiece a jugar más cobertura de presión personal y cosas así, se verá mejor. Simplemente necesita un tiempo en la cobertura con colchón porque existe un espacio ahí, lo que dificulta un poco para los defensivos".
Con Terence Newman de regreso para el 2016, los Vikings todavía no sienten prisa respecto a Waynes, pero es difícil imaginar que no querrán ver más del undécimo recluta global del draft del 2015. Ahora que Waynes ha tenido tiempo para aprender la defensiva, Zimmer espera que el esquinero juegue con mayor confianza.
"Bueno, tú sabes, ha progresado", expuso Zimmer. "Aquí está lo que le dije antes a alguien: el año pasado fue más sobre aprender a hacer lo que debía hacer. Ahora que tiene tacto para el juego, se trata de comprender lo cerrado que debe ser la cobertura. Es momento de continuar empujándolo para que haga más jugadas sobre el ovoide, y es lo que intento hacer que haga. Mi expectativa es que sea más agresivo en la cobertura porque sabe qué hacer ahora".