La Conmebol dio a conocer la sanción a Rosario Central por los incidentes ocurridos el pasado 4 de abril en el Gigante de Arroyito, en partido correspondiente a la Conmebol Libertadores: deberán jugar a puertas cerradas ante Atlético Mineiro el martes 7 de mayo y pagar una multa de 50.000 dólares. El presidente Gonzalo Belloso también deberá abonar 5.000 dólares. Todo se descontará de los derechos televisivos.
Los hinchas de Central arrojaron un vallado a los simpatizantes de visitantes desde una tribuna alta y fue agredido el futbolista Maximiliano Olivera, que sufrió un corte en el rostro por un objeto arrojado desde la platea baja.
Como adicional a la sanción, en el partido siguiente contra Caracas deberá estar cerrada la tribuna Sur, sector desde donde se produjo el lanzamiento del vallado.
La dirigencia del Canalla, que supo de la decisión tras la igualdad 1-1 contra Caracas, se mostró activa para identificar el responsable que arrojó el objeto que impactó a Olivera. Le impuso una caución de 15 millones de pesos y la sanción correspondiente de dos años sin poder presenciar espectáculos deportivos.
Por su parte, Peñarol también sufrió una sanción porque sus hinchas destrozaron los baños del Gigante de Arroyito y también dañaron una tribuna. La multa, para ellos, fue de 25.000 dólares, mientras que el presidente del club, Ignacio Ruglio, fue multado al igual que Belloso con 5.000 dólares por invadir la cancha al final del partido y discutir con él.