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Livan no descarta jugar en club angelino

MIAMI -- Dos de los grandes exponentes del béisbol cubano, los hermanos abridores Liván y Orlando "El Duque" Hernández, se unieron este miércoles para un evento a beneficio con el fin de apoyar a asociaciones sin fines de lucro.

Ambos se enfrentaron en un match a 18 hoyos catalogado como "Con el golf en la sangre", para ayudar al hospital de niños "St. Jude", entre otras organizaciones.

"La verdad que es una causa muy linda", declaró Orlando. "Para nosotros es un honor poder ayudar, y nada más lindo que hacerlo jugando a un deporte que amamos".

Lo que algunos tal vez no sepan, es que además de brillar sobre el montículo, los dos son grandes golfistas.

Competitivos como pocos, quieren ganar a todo lo que juegan.

"Asumo que Orlando está diciendo lo mismo que yo, pero yo voy a ganar", enfatizó Liván. "Veo este evento como la primera edición de muchas por venir".

Los organizadores del evento me confesaron que recibieron interés de Alex Rodríguez y Miguel Cabrera, entre otros por participar. Por ende, lo más seguro es que el próximo año cada figura del béisbol tenga su propio equipo.

Más allá de la gran causa, la cita en el Melreese Golf Club fue la oportunidad perfecta para hablar con Liván acerca de su futuro.

Después de todo, es agente libre en un mercado de abridores sin grandes nombres. Sin embargo, Liván tiene claro cuál es su deseo.

"Sería muy lindo terminar mi carrera con los Marlins", aclaró Liván. "No obstante, varios equipos han demostrado interés, y al final del día haré lo que más le convenga a mi familia".

Liván Hernández fue campeón con los Marlins en 1997. La franquicia de Miami presentará su nuevo logo y uniforme el viernes en el recientemente construido estadio en Pequeña Habana.

"Creo que es el estadio más moderno de las Grandes Ligas en este momento", acotó Liván.

Liván no dio nombres a la hora de informar los equipos que lo contactaron, pero volvió a ratificar que jugaría para cualquier conjunto. El clima ciertamente sería un aliado en California, ya sea con los Angelinos o con los Dodgers, que serían otros de los dos equipos interesados en el abridor cubano.

Justamente estos dos hermanos formaron parte de la última gran generación dorada del béisbol cubano. Desde que llegaron a Estados Unidos, los éxitos han sido más difíciles de conseguir.

"Para mí es algo inexplicable porque hay grandes jugadores", sentenció Orlando. "No sé qué más decirte".

"Obviamente influye el hecho de que muchos de los mejores jugadores han desertado", agregó Liván. "Contra eso no se puede".

"El Duque" sigue más la pelota cubana que las Grandes Ligas, y por eso ha visto jugar al jardinero Yoennis Céspedes, quien ha atraído la atención de muchos equipos de Grandes Ligas.

"Es un gran jardinero, y creo que tendrá una gran carrera en los Estados Unidos", opinó Orlando.

Se especula con que Céspedes recibirá un contrato cerca de los 30 millones de dólares, y los Filis o Yankees son algunos de los interesados en este jugador de 26 años.

Por lo pronto, mientras esperan por las reuniones invernales, los hermanos Hernández se concentran en cumplirles los sueños a otros. Eso sí, eso no quiere decir que abandonen los suyos.

Orlando está en un gran estado físico como de costumbre, y Liván sigue comiendo entradas casi rutinaria año tras año. Y en unas Grandes Ligas en donde cada vez emergen más jóvenes que lanzan a 100 millas por hora, este lanzador cubano igual se las ingenia para ser protagonista.

"El béisbol es como las bienes raíces", explicó Liván. "Lo que importa es la locación, la locación y la locación. Incluso este año he aprendido como lanzarle a bateadores que no conocía tanto, y la experiencia ciertamente ayuda".

Claramente el retiro no está en la agenda inmediata de Liván Hernández.

"Pretendo jugar tres años más", concluyó.