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Dodgers atracados por San Diego

Andre Ethier la sacó en el sexto episodio del encuentro ante los Padres Gary A. Vasquez/US Presswire

LOS ÁNGELES -- Un insólito robo del plato por parte de Everth Cabrera, ante un despistado lanzador Kenley Jansen, abrió la puerta para que los Padres de San Diego anotaran dos veces en la novena entrada y le sacaran la cartera a los Dodgers de Los Angeles, quedándose con un triunfo por pizarra final de 7-6, el sábado, frente a 54,014 espectadores en Chávez Ravine.

Andre Ethier demostró que está de regreso al conectar su primer vuelacercas en Dodger Stadium, en dos meses, bueno para dos de las cuatro carreras que produjo en la jornada, sin embargo la noche fue para un Cabrera que le robó el plato a Jansen (4-3), el taponero azul, quien buscaba un rescata y se llevó la derrota.

Porque además de la estafa, aprovechando que, entre lanzamientos, Jansen se paseaba alrededor del montículo, un error del propio taponero al lanzar hacia el pentágono, abría la puerta para una segunda y decisiva anotación en el episodio, consumada por Will Venable.

"Ellis y otros jugadores me gritaban, para alertarme, pero con el bullicio de los 50 mil aficionados, tan fuerte, no logré escuchar nada," intentaba explicar Jansen, después del juego.

"Ahora, sólo me queda aprender de esta terrible experiencia, y estar listo para salir mañana a hacer tres outs," se animó el diestro curazaleño.

"El parecía que se saldría del atolladero, porque tenía hombres en tercera y primera, sin outs y había sacado a dos bateadores, con ese elevado por segunda y un ponche, pero luego vino esa jugada inverosímil," explicaba el manager Don Mattingly, quien se consolaba asegurando que, "dentro de todo lo malo que puede parecer este error que nos cuesta un juego, es mejor que ocurra ahora y no en una postemporada o en un duelo donde esté en juego algo importante," concluyó el timonel.

Alguien que vio todo de frente, fue el sonorense Luis Cruz, el parador en corto azul:

"El home, el home, le gritábamos, pero él, por un momento, pareció más preocupado por el corredor de segunda, que por el de tercera y cuando reaccionó, ya Cabrera estaba a medio camino," detalló el mexicano.

SIN DECISION
El abridor de los Dodgers, Aaron Harang (6-5), después de su labor de 7 episodios, en los que permitió 4 hits, incluyendo 2 de vuelta entera, que se tradujeron en 4 carreras, 3 de ellas limpias, mientras que caminaba a uno y abanicaba a 4, se quedó sin decisión.

Lo mismo sucedía con el sandieguino Edinson Vólquez (5-7), tras 5 entradas de trabajo, en las que le conectaron 8 imparables, buenos para 4 anotaciones, Regaló 4 pasaportes y ponchó a 6.

El triunfo fue para Alex Hirshaw (1-1).

A GOLPE LIMPIO
Padres y Dodgers iniciaron la riña temprano en el juego y sin que mediara el tradicional round de estudio del boxeo, intercambiaron golpes desde el primer episodio.

El equipo sureño fue el primero en instalarse en la pizarra, anotando una carrera sucia, en los bombachos del segunda base Logan Forsythe, aprovechando una rola al cuadro por parte de Carlos Quentín.

La anotación fue viciada debido a un error del primera base, Juán Rivera, en un batazo de Chase Headley.

Pero vino la reacción de los dueños de casa, quienes, momentáneamente, pusieron paridad en la contienda con una secuela de tres inatrapables: la danza la iniciaba Mark Ellis, con sencillo al bosque central izquierdo, para luego pisar el pentágono con imparable impulsador de Andre Ethier al sector izquierdo.

Ya en el tercer capítulo, los de casa mandaron a batear a ocho de sus hombres y para cuando la tolvanera se despejaba, habían logrado otras dos anotaciones.

Ethier impulsaba su segunda carrera de la noche, enviando hasta el plato, con un sencillo a la pradera derecha, a Bobby Abreu, quien había iniciado todo con un pasaporte gratis.

Enseguida, con las almohadillas atestadas de Dodgers, Juán Rivera recibe cuatro bolas y la tercera anotación azul entra "a caballito," en los spikes de Mark Ellis.

Sin embargo, en la cuarta entrada, los de San Diego vuelven a la pelea, recortando la ventaja azul al mínimo, gracias al octavo vuelacercas de la temporada, en solitario, de Carlos Quentín.

Los Dodgers vuelven a subir una carrera al tablero, con un batazo de dos esquinas de Adam Kennedy, al sector derecho, para que Rivera anotara desde la antesala. La carrera fue sucia, por el error del receptor Yasmani Grandal, cuando Rivera corría entre primera y segunda.

Los Padres siguen con vida y nuevamente recurren al bateo largo para sumar dos rayitas más y volver a poner todo como en el inicio, en el sexto acto.

El antesalista Chase Headley la bota del parque por la barda del jardín derecho, su noveno de la campaña, llevándose por delante a Forsythe.

Pero en la parte baja del mismo capítulo, los dirigidos por Don Mattingly cobran con la misma moneda: un estacazo de cuatro esquinas de Ethier, con Matt Kemp en circulación, que puso a los Dodgers otra vez adelante, por dos carreras.

Una ventaja que volvió a reducirse al mínimo, en el octavo acto, con sencillo impulsador de Quentín, para que anotara el torpedero Alexi Amarista, antes de que llegara la fatídica estafa del noveno acto.

ULTIMO DE LA SERIE
Para este domingo a la 1:10 de la tarde, finaliza y se decide al ganador de la serie ante los Padres y los Dodgers anuncian al derecho Chad Billingsley (4-9), para hacer frente al también diestro Jason Marquis (1-5), por los de San Diego.