<
>

Lakers no es garantía a corto plazo

LOS ÁNGELES -- Ya está todo listo para que Los Ángeles Lakers lleven a cabo su mejor derecho a elección en el Draft desde 1982, cuando James Worthy ocupó la primera plaza de su clase. En esta ocasión les tocará un segundo puesto más que atractivo, además de contar con posibilidades de elección en las posiciones número 27 y 34.

El entorno del club tiene muchas esperanzas puestas tanto en los jugadores que recalen tanto en el Draft como en la agencia libre del 1 de julio. Ansían una reconstrucción con la que sueñan cada noche, una vuelta a las etapas en la que eran uno de los planteles más competitivos de la liga.

Ha llovido mucho desde que una nube gris se ciñó sobre la franquicia a partir del último anillo logrado en 2010. Pensar que las cosas van a cambiar radicalmente esta temporada invita a una reflexión inocente sobre la situación. Las cosas no van a cambiar sencillamente porque no es suficiente con traer a un novato sobresaliente y algunos actores de reparto en la agencia libre. Ni siquiera un jugador de primerísimo nivel podrá salvar a los Lakers de otra temporada difícil con un Kobe Bryant todavía impredecible y lejos de su mejor versión.

Sin embargo, estos son los primeros pasos para seguir construyendo las esperanzas de cara a la temporada 2016-17. Probablemente Kobe se haya retirado para entonces y el espacio salarial de pie a la construcción de un plantel más competitivo. Será entonces cuando Julius Randle y Jahil Okafor (todo apunta a que él será el elegido en la segunda posición), tengan un poco más de experiencia y completen un grupo que empezará a escribir otro capítulo en la historia de los Lakers: la era post-Kobe.

Pero todavía queda una larga campaña de por medio y un verano que, como los últimos, está creando muchas expectativas en la Nación Lakers. Las últimas semanas han sido muy intensas en la franquicia californiana, que ha estado realizando pruebas a más de 80 jugadores de los que muchos acabarán dando el salto a la NBA en breve.

A pesar de la gran cantidad de jóvenes que han pasado por las instalaciones del Toyota Sports Center de El Segundo, el cerco se ha estrechado en los tres jugadores con opciones reales de recalar en los Lakers: el pívot de Duke, Jahil Okafor, el que más papeletas tiene para acabar vistiendo de púrpura y oro en los próximos años; D´Angelo Russell, guardia de Ohio State, y su homólogo Emmanuel Mudiay, que militó en China la temporada pasada.

La plana mayor de los Lakers también mostró mucho interés en Kristaps Porzingis, jugador de Letonia, a quien observaron en Las Vegas antes de traerle para una prueba privada en el sur de California, según reportó Eric Pincus para el L.A. Times.

Sin embargo, se ha echado de menos a un jugador que probablemente se convierta en la primera elección de su clase: el dominicano, Karl-Anthony Towns, quien estuvo varias semanas ejercitándose en Los Ángeles. A pesar de su cercanía, el pívot no acudió a la llamada de los laguneros. Sí asistió a Minnesota para entrenar con los Timberwolves. Todo apunta a que la franquicia se hará con los servicios del centro en el puesto número uno, quien a pesar de confesar ser admirador de Kobe Bryant, parece tener claro cuál será su futuro.

La rutina con estos jugadores que potencialmente podrían acabar en los Lakers ha sido muy parecida. Se les ha visto en acción en dos ocasiones. Durante la primera, la noche antes de saltar a la duela, Mitch Kupchak y Jim Buss, junto a otros directivos, salían a cenar con ellos de manera individual. Al día siguiente formaban parte de un entrenamiento individualizado, algo fuera de lo común ya que en general fueron partidos de tres contra tres. Los privilegiados en este sentido fueron Okafor, Russell, Mudiay y el que apunta a quedar en la decimocuarta posición: Cameron Payne, guardia de Murray State.

Además de los ya mencionados, los Lakers echaron un vistazo a otros seis jugadores que según los vaticinios serían escogidos en primera ronda. Y es que algunos de ellos podrían recalar en la franquicia en los puestos 27 y 34. Delon Wright apunta a salir en la posición 21; el delantero Rondae Hollis-Jefferson, en el puesto 22; el guardia Rashad Vaughn, en el 26; Justin Anderson, en el 27; el ala-pívot de Texas Jonathan Holms, en el 28; y el jugador de Louisville Terry Rozier, en el 30. Todos ellos pasaron por las instalaciones de los Lakers.

Hay ilusión, hay muchas ganas y los Lakers están en una situación inmejorable para conseguir a un jugador que acabe por explotar pronto en la mejor liga del mundo. No será suficiente para este año, pero la era post-Kobe se acerca y tanto los jugadores de este draft, el anterior y el siguiente podrían ser los futuros salvadores de los laguneros.