PARÍS -- Luego de la caída de Leonardo Mayer en el primer día de acción, fue otro día negativo para los argentinos en Roland Garros y peor que el de la apertura. Es que perdieron los tres que se presentaron: Juan Mónaco, Carlos Berlocq y Martín Alund. De los varones sudamericanos, sólo festejó el uruguayo Pablo Cuevas, a semanas de su regreso y tras levantar dos match-points.
Mónaco, 17° preclasificado, nunca pudo pasar de los octavos de final en el Abierto de Francia, el segundo Grand Slam de la temporada, y esta vez decepcionó como en otras ocasiones o aún más duro fue el golpe. Iba 2-0 en sets y cayó en cinco ante el español Daniel Gimeno Traver (49º), quien lo superó por 4-6, 4-6, 7-6 (4), 6-4 y 6-4.
El segundo mejor argentino y que aparecía como líder este año, por la baja de Juan Martín del Potro (7º), empezó mu sólido, con muy buen ritmo, tras consagrarse campeón la última semana en el ATP 250 de Dusseldorf, pero no supo cerrar el encuentro en el tercer parcial y se le complicó.
Su temporada, cabe destacar, venía en ascenso tras un pálido inicio de año. Antes del título en Alemania había alcanzado las semis en Houston y los cuartos de final en Barcelona. El título en suelo alemán le daba inyección anímica, pero no fue suficiente 48 horas después de conseguir su octavo título ATP.
La pérdida del tie-break en el tercer capítulo fue un impacto duro para Mónaco, que defendía los puntos de los octavos logrados en País en 2012, y hasta pareció recuperarse en el quinto set, tras recuperar el quiebre de saque perdido. Volvió a fallar más de la cuenta y su rival aprovechó la situación, con pulso firme, para avanzar de ronda.
Por su parte, Berlocq (71°) sabía que tenía un desafío diferente, más peligroso y así le fue contra el estadounidense John Isner, 19° cabeza de serie, ya que perdió 6-3, 6-4 y 6-4.
El gran sacador logró una buena victoria sobre polvo de ladrillo, su superficie más esquiva, imponiendo el ritmo del partido con sus saques y sus derechas, evitando los puntos extensos que trató de proponer el tenista de Chascomús, quien no había tenido un buen inicio en la gira europea de canchas lentas.
En tanto, en el primer turno de la misma cancha 2, Alund (100° del ranking ATP) tuvo debut y despedida ante el local Edouard Roger-Vasselin (65°), que viene de hacer semifinales en Niza. En el primer cruce entre sí, el argentino perdió 6-2, 4-6, 6-1 y 6-0.
Alund sufrió 6 aces del galo, quien se llevó el 70 % de los puntos jugados con su primer servicio. El local obtuvo 8 de 19 chances de quiebre y el argentino sólo concretó 2 de las 7 que dispuso.
El mendocino, que este año alcanzó las semis en San Pablo, participó por primera vez en el main draw de Roland Garros, luego de haber estado en las clasificaciones de 2009, 2010 y 2012.
Por su parte, Pablo Cuevas, quien está presente en Roland Garros con ranking protegido, volvió a un Grand Slam luego de dos años, tras lesionarse duramente en una rodilla en Roland Garros 2011, y lo hizo con una durísima victoria sobre el local Adrian Mannarino por 6-3, 2-6, 6-3, 5-7 y 7-5, ganando así un quinto set por primera vez desde Wimbledon 2009.
El uruguayo, campeón de dobles en París hace cinco años junto con el peruano Luis Horna, venció al anfitrión en más de tres horas y estuvo 2-5 en el quinto set. Es más: levantó dos match-points. Se recuperó, siguió firme, sin caerse moralmente y terminó logrando su primera victoria en singles en el Abierto de Francia y la cuarta en un Grand Slam.
Cuevas figura actualmente 762º en el ranking ATP, en el que llegó esta 45º en septiembre de 2009. Su próximo rival será el francés Gilles Simon (15º preclasificado), ex top-ten, que el domingo remontó tras ir 0-2 en sets contra el australiano Lleyton Hewitt y triunfó por 7-5 en el último, como el uruguayo.