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Historias mínimas

BUENOS AIRES -- Como es habitual, en ESPNtenis.com repasamos las historias paralelas de la semana tenística. Detalles, curiosidades, frases destacadas y todo el color del circuito.

Federer x 15
Mayo de 1999. Un joven suizo de 18 años, 111° del ranking y sin experiencia en Grand Slams, se hacía acreedor de una invitación para el cuadro principal de Roland Garros. Sobresalía como ex-N°1 Junior y aunque traía poco recorrido entre los profesionales ya sumaba tres accesos a cuartos de final en el máximo circuito. El chico, claro, era Roger Federer, y por estos días ese debut Major cumple 15 largos años. En el medio, 59 participaciones más, y 17 títulos, como para convertir a aquel adolescente en leyenda...

Pero el recuerdo de aquel debut no es solo estadístico. La incursión parisina de Roger versión 18 años tuvo las particularidades del caso: le tocó enfrentarse a Patrick Rafter, por entonces N°3 del mundo y vigente campeón del US Open. Y el suizo derribó cualquier pronóstico llevándose la primera manga por 7-5. Luego, el australiano impondría su oficio (5-7, 6-3, 6-0 y 6-2), pero el apellido Federer ya empezaba a generar eco dentro del planeta tenis.

"Tengo un hermoso recuerdo de aquel Roland Garros. Ya estar jugando el main draw era muy emocionante. Pero encima contra Rafter, en la Suzanne Lenglen ¡y empezando set arriba! -evocó Roger-. Por entonces se daban puntos bonus por ganarle a jugadores top. Podía sumar un montón. Pero al mismo tiempo sabía que era imposible vencerlo". "Era como la historia del burro y la zanahoria", graficó.

"De cualquier manera fue una gran experiencia. Rafter, junto con Sampras, era uno de mis jugadores favoritos en el tour. Me sirvió mucho anímicamente haberle podido hacer frente", agregó el suizo, que, curiosamente, tampoco le pudo ganar al australiano en los dos enfrentamientos que mantuvieron años después.

La máquina de hacer amigos
Ernests Gulbis, abonado a esta sección, volvió a hacer ruido en Niza. Por lo tenístico (logró su segundo título del año y se subió al puesto 17 de la ATP) y, claro, por lo extradeportivo: esta vez, en el duelo de octavos de final, ante Martin Klizan, donde el letón terminó imponiéndose en tres mangas.

Gulbis comenzó en mejor forma, con ventaja de 4-1, pero se nubló y cedió el primer parcial en tiebreak, haciendo viajar al piso a la enésima raqueta del año. Suficiente para enrarecer un contexto que algunos reclamos al umpire terminarían por caldear del todo.

¿Por qué? Klizan asumió que su rival solo estaba empleando tácticas de distracción y no se quedó callado en el saludo final: "Pensé que habías cambiado, pero no", le lanzó a Gulbis. Y el letón, ya relajado ante la prensa, concedió: "Sí, lo hice enojar y eso jugó un poco en mi favor, así que bueno... un amigo menos en el tour".

Sponsor se busca
Dusseldorf es una plaza más que tradicional en el circuito masculino. Primero de la mano de la Nations Cup, torneo por equipos que luego pasó a llamarse Campeonato Mundial y donde Sudamérica cosechó seis títulos, entre Argentina y Chile. En 2013, el certamen se discontinuó ante la salida de su principal sponsor, pero aparecieron el omnipresente Ion Tiriac -dueño también del M1000 de Madrid- y el ex Top 10 Rainer Schuettler para comprar la licencia y convertirlo en un evento ATP de categoría 250, que en su versión estreno quedó en manos de Juan Mónaco.

Lo cierto es que ya en su segunda edición, la falta de patrocinadores volvió a ser una realidad, y, mientras no haya firmas aliviadoras, el futuro del certamen será incierto. "Sin un main sponsor se complica mucho seguir. No estamos en este negocio para perder dinero", ilustró Gerard Tsobanian, mano derecha de Tiriac, según reproduce el periódico alemán RP.

El propio medio sugiere que habría dos empresas internacionales dispuestas a desembolsar el millón y medio de euros que se necesitan, pero aún es pura especulación; la misma que alimentaba una potencial mudanza a Berlín en 2015.

Consecuencias, en definitiva, de salir al ruedo a solo días de Roland Garros: "Sabemos que Nadal, Federer o Djokovic nunca vendrán aquí. Es absolutamente irreal siquiera plantearlo. Por más plata que le puedas ofrecer -subrayó otro miembro de la organización-. Pero de cualquier manera confío en que este no será el final". ¿Habrá salvación?

Hantuchova: el tenis por sobre la maternidad
Las rápidas despedidas en Madrid y Roma y la semana de impasse previa a Roland Garros, le dieron a Daniela Hantuchova un poco de tiempo libre para abocarse a otras tareas. En esta ocasión, dos entrevistas con un punto fuerte de conexión: la maternidad.

Mientras remarcaba su tentación por los dulces, su creciente interés en jugar al golf y esquiar sin miedo a lesionarse y de su sueño de ver en vivo a U2, la eslovaca esquivó hasta donde pudo su situación amorosa. Y ahí, a sus 31 años, se explayó sobre el embarazo y su práctica profesional del deporte.

"Sería hermoso, sin dudas, pero ahora mi prioridad es el tenis", matizó. "Roger Federer acaba de agrandar su familia y Novak Djokovic va en camino a su primer hijo, pero para los hombres, obviamente, es más fácil, porque durante el embarazo pueden jugar. En mujeres solo lo hicieron Lindsay Davenport y Kim Clijsters", explicó en el diario Jeden Den de su país.

Pero tiene un serio dilema. "No puedo esperar a tener una familia", deslizó en la revista estadounidense Pacific San Diego. Y entonces no deja pasar el tiempo, en cierta forma. La eslovaca colabora con un hospital de Camboya, que cuenta con 120 niños con HIV positivo, y comenzó a cumplir un rol de caridad para los más pequeños cerca de Poprad, su ciudad natal original en Eslovaquia.

"Amigas por siempre"
Hay noticias que impactan. La semana pasada conmovió, en el deporte mundial, la ruptura entre dos ex Nº 1 en sus disciplinas, ya que el golfista norirlandés Rory McIlroy "plantó" a la tenista danesa Caroline Wozniacki. "El problema es mío", dijo él, después de años en pareja e inclusive de enviar las invitaciones para la boda. Explicó no estar preparado para el matrimonio y le deseó lo mejor a ella. Enseguida, Serena Williams, la reina actual del circuito WTA, salió a apoyar a su colega.

Sin dudas, fue un gran gesto de la estadounidense. En los tiempos que corren, la voz de aliento llegó vía una de las redes sociales de moda. En su cuenta de Twitter, la rubia danesa dijo vivir "tiempos difíciles". Y la menor de las Williams le escribió: "Yo siempre voy a caminar con vos", con el hashtag "amigas por siempre". No tardó en llegar el agradecimiento de Wozniacki, criticada por muchos porque llegó a ser la líder del ranking sin ganar un título de Grand Slam. En contrapartida, Serena, nueve años mayor que la europea, ya logró 17 en singles.

Fanática confesa del Liverpool, cuyo himno es "Nunca caminarás solo" ("You'll never walk alone"), encontró el apoyo de una rival como Serena, que le dio muchos dolores de cabeza adentro de una cancha, ya que le ganó seis de los siete duelos oficiales. Lejos de cualquier tipo de rivalidad, la líder mundial volvió a demostrar su simpatía con la danesa, a la que no tildó de racista, como sí lo hicieron varios medios, cuando Wozniacki se puso toallas en la remera y la pollera para imitar el cuerpo y las curvas de la estadounidense en una exhibición. Eso ocurrió cuando jugó con la rusa Maria Sharapova, en diciembre de 2012, lo que no molestó a Serena.

"Creo que lo haría diferente la próxima vez ". Así había respondido la norteamericana a la "actuación" de la danesa en aquella oportunidad. Lejos de enojarse, ella dejó en claro su afinidad, mientras mucha gente salió a decir que se trató de una ofensa. Sin ir más lejos, el representante de Serena aclaró que "fue todo con buen humor y Serena y Caroline siguen siendo muy buenas amigas". Vaya si lo ratificó ahora, cuando la danesa vive quizás el peor momento de su vida.