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Para los Dallas Cowboys, la oportunidad se presenta ahora

IRVING -- En el pasado par de años, se ha hablado de que se abren y cierran las ventanas de oportunidad para los Dallas Cowboys.

Casi siempre tiene que ver con la salud de Tony Romo.

Con tres temporadas consecutivas de 8-8 del 2011 al 2013 tras un 6-10 en 2010, en que Romo jugó solamente seis encuentros por una fractura en la clavícula, los Cowboys enfrentaron una ventana que se cerraba cuando Romo estaba en sus 30s tempraneros.

Con un récord de 12-4 en el 2014, la ventana de los Cowboys --y la ventana de Romo-- parecía estarse volviendo a abrir. El quarterback tuvo su mejor campaña. Los Cowboys habían construido una de las mejores líneas ofensivas en la liga. Seleccionaron a tres talentos de primera ronden Byron Jones, Randy Gregory y La'el Collins pese a sólo una selección de primera vuelta.

Luego, ocurrió el 2015. Romo jugó apenas dos partidos completos. Los Cowboys finalizaron 4-12, ganando apenas una vez sin Romo, quien sufrió dos fracturas en la clavícula izquierda.

Una vez más, parece que se cierra la ventana.

El analista para ESPN, Louis Riddick, criticó a la plantilla, apuntando que los Cowboys no cuentan con un plan de sucesión para el quarterback; sufren severas deficiencias para presionar a los pasadores; hay interrogantes serias respecto a lesiones, longevidad y carácter entre los apoyadores; y simplemente no existe suficiente talento en la secundaria.

Los Washington Redskins se enfrentan a la interrogante de que Kirk Cousins pueda o no replicar lo conseguido el año pasado. Los New York Giants tampoco cuentan con un plan de sucesión detrás de Eli Manning y llevan tres campañas perdedoras consecutivas. Los Philadelphia Eagles parecen llevar un plan opuesto, llenándose en la posición con Sam Bradford, Carson Wentz y Chase Daniel.

Luego de la temporada del 2014, no había realmente discusión acerca del plan de sucesión para los Cowboys, incluso con Romo cumpliendo 35. Aquí está el plan: cuando los Cowboys verdaderamente necesiten hallar a un heredero para Romo, harán lo que hicieron los Eagles para seleccionar a Wentz y creen que su línea ofensiva, así como Ezekiel Elliott, facilitarán la vida a un joven pasador.

La presión sobre los mariscales de campo puede mejorar si la ofensiva obtiene más ventajas. La secundaria puede mejorar si la ofensiva obtiene más ventajas.

Y mucho de eso depende de Romo en el 2016 y probablemente hasta el 2018. Romo no ha jugado una temporada completa desde el 2012. Se perdió el final de la campaña del 2013 que era un partido crítico ante los Eagles por una lesión en la espalda. Se perdió un encuentro del 2014 por la fractura de dos procesos transversales fracturados. Faltó a 12 juegos el año pasado por lesiones en la clavícula.

La ventana de los Cowboys es ahora, lo que hace que llamen la atención sus movimientos --o falta de ellos-- en el receso de temporada.

Jaylon Smith, su recluta de segunda ronda, podría ser el mejor jugador de la clase de draft en el 2016 si su rodilla responde a la rehabilitación pero eso no ayudará a ganar a los Cowboys en este año porque no va a jugar. Los Cowboys no seleccionaron a un defensivo especializado en presionar a los pasadores hasta la cuarta ronda del draft. No tomaron a un esquinero hasta la sexta vuelta. Firmaron al ala defensiva Benson Mayowa procedente de los Oakland Raiders, y lleva apenas dos capturas.

Mantuvieron en el equipo a Morris Claiborne, quien lleva tres intercepciones de por vida, y a Brandon Carr, quien no ha interceptado un pase desde el día de Acción de Gracias del 2013.

Quizás decir que "llamean la atención" sea demasiado benevolente, pero la estrategia de los Cowboys es simple: mientras juegue Romo, la ventana está abierta.