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La Ofensiva en Serie de Raúl Allegre tras los Campeonatos de Conferencia

Tom Brady como QB, es un administrador de partido. No, no estoy delirando. Sí, estoy un poco cansado después de haber viajado 9,000 kilómetros en cinco días y no haber dormido más de tres horas anoche, pero sigo firme con mi observación: Tom Brady como QB, es un administrador de partido.

Espero sigan leyendo esta nota y que antes de que se rasguen las vestiduras, me permitan elaborar mi argumento.

No existe una "definición" de lo que es un administrador de partido en la NFL, pero la he visto usada para describir a QBs que no arriesgan, y que seguido buscan al receptor que corre la trayectoria de escape durante momentos de presión. Tom Brady hace todo eso, y lo hace muy bien, bueno quizás con la excepción de no arriesgar lo cual lo hace de vez en cuando y tomando riesgos calculados. MI definición de un administrador de partido es el QB que ejecuta el plan ofensivo no sólo al pie de la letra, sino a la perfección. Y no hay NADIE en la NFL, hoy en día, ejecutando planes de juego ofensivos mejor que como lo hace Brady.

El QB que más recibe la descripción de administrador de partido es Alex Smith. Y lo es. Alex Smith ejecuta el plan ofensivo de la misma manera que lo hace Tom Brady. La GRAN diferencia es en el diseño del plan ofensivo que ejecuta cada uno. Y ahí yace el secreto del éxito de Tom Brady. Sus planes de juego, por lo general, tienden a ser excelsos. Hay uno que otro malo (Houston) que suceden con la frecuencia que se ve el cometa Halley.

Los planes que recibe Brady son preparados meticulosamente. Cada martes, normalmente el día de libre de los jugadores de la NFL, Brady se reúne con Bill Belichick para identificar las áreas de importancia del siguiente partido. Analizan las tendencias del rival, los puntos fuertes y las posibles debilidades. Esas reuniones duran de dos a tres horas, como lo reporta Greg Garber, colega y amigo de ESPN. Para el martes tanto Belichick como Brady ya hicieron su tarea. Revisaron video del siguiente rival e identificaron los temas por tratar.

Para Brady es un SÚPER LUJO, tener a la mejor mente defensiva en la historia de la NFL analizando lo que va a enfrentar el próximo partido: qué tipos de frentes puede anticipar de la línea defensiva, lo que cree que van a hacer los linebackers, y qué tipo de coberturas podría ver en la defensiva secundaria. Una vez revisado el material queda lista la base de lo que será el plan ofensivo del siguiente juego. Y el plan cambia radicalmente cada semana. Por ejemplo, el jugador clave del partido contra Houston fue Dion Lewis, quien fue protagonista en 20 de 67 jugadas ofensivas. Seguramente los entrenadores defensivos de Pittsburgh pensaron que volvería a ser importante y prepararon esquemas para neutralizarlo, pero en el campeonato de conferencia, Lewis pasó prácticamente desapercibido. LeGarrette Blount fue el corredor principal y Chris Hogan, quien, había tenido una campaña sólida y que jugó bien contra Houston, fue el protagonista del partido. La defensiva de pase nunca supo qué hacer con él, cómo marcarlo y no hicieron ajustes durante el partido para neutralizarlo. Su producción no fue mayor sólo porque soltó los dos últimos pases lanzados en su dirección.

Una vez que recibe el plan ofensivo del partido, Brady dedica toda la semana a perfeccionarlo. Esto incluye las juntas, prácticas y sesiones de video, y también el régimen alimenticio, las horas de ejercicio adicional y el tiempo de reposo. Y si a esto le sumamos el espíritu competitivo de Brady, tenemos la fórmula perfecta. ¡TODO cuenta!

Esta es la clave del éxito de Tom Brady, la sociedad que ha tenido durante años con Bill Belichick. Son como el hidrógeno y el oxígeno. Separados son elementos importantes de la tabla periódica que aprendimos en las clases de química (asumo que mis lectores pusieron atención en la secundaria), pero juntos en la proporción justa forman el agua, que es la substancia principal de la vida. Bill y Tom son como Paul, John, George y Ringo. Separados fueron excelente artistas, pero juntos fueron los Beatles.

La combinación Bill/Tom, o Tom/Bill, genera excelencia, por más que le cale a muchos detractores. Yo no soy fan de los Pats, pero soy fan del fútbol americano. Un fan de corazón no tiene que apoyar o irle a los Patriotas, pero no es un verdadero aficionado a este gran deporte si no aprecia los logros de este par. Por eso siempre sonrío cuando recibo mensajes diciendo que Brady ha hecho mucho con poco, o que otros QBs tienen mejor línea ofensiva y mejores receptores. Brady tiene lo mejor. Tiene a su disposición a la mente más analítica y detallista en la historia de la NFL.

Volviendo al tema de administrador, no lo uso con desdén ni con el afán de denigrar los logros de Brady. Su plan ofensivo no tiene limitaciones y está diseñado para explotar las deficiencias de sus rivales y usar los propios argumentos ofensivos al máximo nivel. Muy pocos QBs en la NFL podrían "administrar", o como yo prefiero decir, ejecutar, el plan ofensivo que recibe Brady cada semana. En la vida, hay administradores brillantes que tienen a su cargo múltiples responsabilidades: finanzas, contabilidad, operaciones, recursos humanos, desarrollo, etc. A los administradores menos capaces no les asignan muchas responsabilidades.

Brady puede hacer todo, y lo hace todo, por lo general muy bien. Otros QBs menos capaces, NO tienen en sus respectivos planes ofensivos las jugadas que tiene Brady.

Este fue mi argumento. Ahora así, ¡adelante! Se aceptan críticas constructivas, respetuosas y bien elaboradas.

Este año mis favoritos en AGOSTO para llegar al Super Bowl se quedaron en el camino. Seattle fue eliminado por Atlanta y Kansas City por Pittsburgh. Me queda un pequeño consuelo. Ambos fueron los últimos en derrotar a los protagonistas del Super Bowl. Los Pats fueron vencidos por Seattle en la Semana 10, y Atlanta cayó ante Kansas City en la Semana 13. Tanto Seattle como Kansas City tuvieron lesiones a jugadores importantes después de esos partidos que no pudieron compensar. En el futuro, tendrán que adaptarse mejor para superar la adversidad que siempre está presente en la NFL.

Finalmente, le quedo a deber a los fans de Atlanta. Fue difícil seguir el partido contra Green Bay el domingo mientras me preparaba para la narración de mi juego. Escribir sin fundamentos hubiera sido una afrenta al respeto que se merecen.