<
>

No sorprende decisión de la NFL de cancelar juego en el Azteca

Fue una verdadera vergüenza lo que hicieron los administradores del Estadio Azteca con el recinto en las semanas previas al partido de la NFL. Teníamos el juego del año entre dos serios contendientes. Lo habían nombrado el Super Bowl XLII ½. Íbamos a ver a los dos candidatos a MVP en Todd Gurley y Patrick Mahomes. Ya no. El juego se realizará en Los Angeles por las deplorables condiciones de la cancha.

Estuve en el último concierto de Shakira el 12 de octubre y vi un día después como quedó la cancha. ¡PERO QUEDABAN CINCO SEMANAS! Todavía hace pocos días hubo otro concierto masivo en el Azteca y un partido de fútbol el sábado.

¿Quién tomó esas decisiones? A pesar de todo lo que había pasado, había tiempo de restaurar la cancha. Wembley este año tampoco estuvo en las mejores condiciones, pero nada como el chiquero en que convirtieron a la cancha del Azteca. Habrá quien diga que la vida no gira alrededor de la NFL, y quizás tengan razón, pero las decisiones que tomaron los administradores del Azteca fueron también un insulto y un riesgo para los jugadores y equipos de la Liga MX, incluyendo los del plantel que pertenece al grupo dueño del lugar, que se arriesgaron al jugar en esas condiciones.

Estoy muy triste por la decisión que se tomó, pero la veía venir y no me sorprende. Queda por ver el impacto a futuro. Pasaron 10 años desde que la NFL decidiera regresar a México. Las dos primeras experiencias tuvieron sus problemas, pero en general los equipos que participaron tuvieron una buena experiencia. De hecho, no creía descabellada la idea que la NFL considerara a México en el futuro para un Super Bowl. Existe la infraestructura hotelera, la capacidad organizativa y un horario cómodo para la televisión.

Ahora dudo que la NFL regrese a México el próximo año o en un futuro cercano.

Espero equivocarme rotundamente, pero temo volver a estar en lo correcto.

Lo más triste es el impacto en la gran afición al fútbol americano de México que siempre se ha entregado a sus equipos, y a la NFL en general. Estoy con ustedes.

¿Quiénes son los Titanes de Tennessee? OK, OK, OK, me queda claro que son los antiguos Petroleros de Houston, y que juegan en la División Sur de la conferencia Americana. Que tienen un grupo de aficionados apasionados en México aunque no sean muchos.

Mi pregunta es respecto a lo que han hecho recientemente en los emparrillados de la NFL. ¿Son el equipo que jugó bien y pudo ganarle a los potentes Cargadores de LA, que dominó a un Dallas que quizás no es tan malo, y que borró completamente del terreno de juego a los Patriotas? O ¿Son el equipo que perdió contra Buffalo y que fue humillado por Baltimore 0-21?

Me inclino por la primera opción. Tuve la oportunidad de estudiarlos antes del "MNF" de la Semana 9, y vi un poco, no todo, el partido contra Pats. Este es un grupo que poco a poco asume la personalidad y el carácter de Mike Vrabel, su entrenador en jefe. El reporte sobre Vrabel es que es una persona de personalidad magnética por el cual sus jugadores harían hasta lo imposible. Esa fue la versión del porque lo contrataron los Titanes a pesar de no tener experiencia como head coach y después de haber sido un coordinador defensivo mediocre en Houston. Además, tengo información confidencial.

Mi hijo, Raul Jr., trabajó tres veranos con los Texanos de Houston. En una ocasión tenían prácticas conjuntas en Santa Clara con los 49ers. En una ocasión, después de un día largo de trabajo, mi hijo y sus compañeros de trabajo llegaron tarde al bar del hotel para encontrarlo cerrado, pero les dijeron que en la tienda del hotel vendían cervezas. Procedieron a limpiar el refrigerador. Eran varios muchachos. Poco después llegaron los coaches al bar, incluyendo a Vrabel, y tuvieron la misma experiencia. Mi hijo y un amigo se percataron de la situación y ofrecieron compartir las cervezas con los coaches. Este les valió muchos puntos. Al final, Vrabel le habló a mi hijo y le dio un billete de 100 dólares. Fue el único coach que los reconoció.

A partir de entonces forjaron una relación que aún perdura. Cuando Vrabel fue contratado por Tennessee, mi hijo le mandó un mensaje de felicitación. Vrabel le contestó en menos de cinco minutos.

Raul, trabaja ahora con Jacksonville y antes del partido tuvo una conversación breve con él. Esta es quizás una historia trivial, pero demuestra mucho el carácter de una persona. La opinión de Raúl es que Vrabel tiene una personalidad especial y que los jugadores responden. Se está viendo en el terreno de juego. Todos los equipos tienen momentos difíciles y partidos para el olvido. Los equipos buenos aprenden de esas experiencias, las usan para mejorar y siguen adelante. Por lo pronto, ya vencieron a los dos campeones defensores de conferencia. Esta División Sur se va a poner interesante en la recta final de la temporada.

El actual líder es Houston, quien tuvo semana libre después de hilvanar seis victorias consecutivas. La defensiva está empezando a carburar contando, por fin, con los servicios de J.J. Watt y Jadeveon Clowney en plenitud. La baja de Will Fuller cambia el diseño de la ofensiva, pero la contratación de Demaryius Thomas va a compensar algo. No tiene la velocidad de Fuller, pero como lo demostró antes Denver, puede ser todavía un receptor peligroso.

Indianapolis también va para arriba. Por fin conjuntaron una línea ofensiva sólida para Andrew Luck. Han podido correr mejor el balón, aunque les falta un complemento para T.Y. Hilton. Eric Ebron está jugando como la selección de primera ronda que fue con Detroit. La defensiva todavía está en proceso de formación, pero hay dos factores positivos. Defienden mejor el juego por tierra, y han forzado 14 entregas de balón. Sabremos mucho más de ellos esta semana que visitan a Tennessee.

Jacksonville ha sido la decepción de la división. Eran favoritos de muchos para llegar al Super Bowl después de haber llegado al campeonato de conferencia el año pasada y perdido por una decisión arbitral. La debacle de los Jaguares coincidió con la baja de Cam Robinson, su tackle izquierdo, las lesiones a sus dos alas cerradas principales y a la baja temporal de Leonard Fournette. La defensiva, debatiblemente la mejor de la NFL en 2017, ha sido una gran decepción. Han tenido lesiones, pero eso sucede en todos los equipos. No han podido recuperar el nivel de 2017.

Hablando de tener un nivel más bajo que el 2017, nadie lo refleja más que Philadelphia. La verdad no me sorprende. No los puse en mi predicción de los equipos que llegarían a playoffs. Tuve la oportunidad de vivir dos temporadas post-victoria de Super Bowl, y no es fácil.

Primero, para ganar el Super Bowl se tienen que conjugar varios factores. A veces hay pocas lesiones, pero si se tuvieron, hubo la manera de superarlas. Philadelphia lo pudo hacer después de la baja de Carson Wentz. Este año ha sido más complicado, primero con la ofensiva y recientemente con la defensiva. El calendario incluye a los otros líderes de división. El receso de temporada es más corto y las distracciones abundan.

Antes de que iniciara la temporada no vi cambios favorables en una defensiva que fue asediada en el Super Bowl. Perdieron a Patrick Robinson quien había sido clave y los reemplazos no eran del mismo nivel. La línea ofensiva ha decepcionado debido a lesiones y a un nivel de juego más bajo y extrañan el impacto 1-2 que tuvieron con Jay Ayaji y LeGarrette Blount. Del lado positivo, juegan en una división que podría ganarla un equipo con marca 8-8, y todavía les faltan cuatro juegos en la división.

Finalmente, se complica la situación para los Patriotas dentro de la conferencia. Van detrás de Kansas City, LAC, y Pittsburgh en lo que respecta a la ventaja de jugar toda la postemporada como local. Los Pats han avanzado al Super Bowl con un par de victorias en Pittsburgh, pero a eso fue en 2001, y 2004, cuando Tom Brady era mucho más joven. Han perdido el derecho de ir al Super Bowl en Indianapolis y en Denver.

Sin más, ¡rumbo a Atlanta!