Dicen que lo prometido es deuda, y la semana pasada le quedé mal a los fans de Chicago. Había dicho que escribiría sobre ellos, pero la verdad se me pasó. No hay otra razón. Me enfoqué en otros temas y llené el espacio que normalmente ocupo para esta nota. No sé si lo que viene en unos renglones más sea de su agrado, pero es solamente una opinión que busca ser objetiva.
Los Osos son un equipo que han excedido expectativas, por lo menos las mías. No los tenía en playoffs al inicio de la temporada colocándolos como el tercer mejor equipo en su división, a pesar de que tenían una defensiva Top-10. Vale mencionar que la nota que escribí al respecto fue previa al canje de Khalil Mack. Esto habría cambiado mi perspectiva. Los habría considerado para ser un candidato a comodín, pero no para campeón de división. Con base a lo que he visto hasta el momento, deben ganar una división en la que Minnesota, y sobre todo Green Bay, han decepcionado. Tendrán un partido de comodín en casa, el cual sería altamente probable que ganen, pero no lo veo llegando más lejos.
Vi el partido que jugaron contra NYG al mismo tiempo que estaba siguiendo otros cuatro juegos. En pocas palabras, no vi cada jugada. Me pareció un equipo que está a uno o dos años de contender por el título de la conferencia. No me refiero a la parte ofensiva. Chase Daniel es un quarterback suplente que dio todo lo que puede dar ante una defensiva que no llega a mediocre. Me decepcionó el desempeño de su defensiva.
Saquon Barkley es un jugador fuera de serie, pero otros equipos lo han podido contener. Recuerdo el "Monday Night Football" contra Atlanta en el cual no fue factor. Esa noche tuvo 94 yardas totales y un promedio de 3.1 yardas por acarreo. Contra Chicago, Barkley tuvo 146 yardas totales. Los sorprendieron con una jugada truco, que después Chicago reviró para llegar a la prórroga. En esa jugada Eddie Jackson queda fuera de posición. Ahí les doy el beneficio de la duda. La que no tiene perdón, fue la de cuarta y 1 en la que Adrian Amos, y otros en la secundaria, pierden de vista a OBJ, el mejor receptor de los Gigantes. La defensiva de pase --linebackers, safeties y esquineros-- estaba completamente confundida y Beckham quedó completamente solo. La defensiva de Chicago es excelente, pero defensivas de campeonato no cometen esos errores.
Mitch Trubisky regresará tarde o temprano a comandar la ofensiva. A pesar de las estadísticas, sigue siendo un quarterback inconsistente que como lanza un gran pase, falla otro. Ha sido muy efectivo corriendo y pienso que bajo el tutelaje de Matt Nagy seguirá progresando, pero por el momento, está muy por detrás del nivel de Patrick Mahomes y Deshaun Watson, los dos quarterbacks que fueron seleccionados después que él. Tarik Cohen y Taylor Gabriel son los líderes en recepciones, por lo que falta un receptor de primer nivel y que Trubisky alcance un nivel de consistencia. Equipos de campeonato no pueden perder partidos en la recta final de la temporada contra equipos con sólo tres victorias.
Fue una semana dura para la NFL. Primero tuvimos la noticia del despido de Reuben Foster poco antes del partido de San Francisco en Tampa Bay por un incidente de violencia doméstica en el hotel del equipo. Loable la reacción rápida y sin empacho de la directiva de los 49ers para cortar a un jugador que fue primera selección. Demostraron que las prioridades del equipo están en su debido lugar. Penosamente, Foster fue adquirido por Washington, y está en la lista de jugadores exentos del comisionado.
Días después, salió al público el video de Kareem Hunt agrediendo a una mujer y a otras personas. ¡Este incidente ocurrió en FEBRERO! Tanto la directiva de los Jefes como la NFL estaban conscientes de lo que sucedió, pero por segunda ocasión, siendo la situación de Ray Rice la primera, no obtuvieron el video que muestra los hechos. La NFL tampoco entrevistó a Hunt a durante su proceso de “investigación”. No entiendo cómo llevas a cabo una investigación y no entrevista al protagonista de los hechos. La directiva de Kansas City sí entrevistó a Hunt, quien en una charla con Lisa Salters de ESPN admitió que mintió. Al confirmar la mentira, y con el video parte del dominio público, Hunt fue despedido. Lo triste es que de no haber salido este video, Hunt habría jugada el fin de semana pasado. Nadie lo reclamó tan pronto pasó el período de espera.
Kansas City no tenía opción. Saben que el nivel de la ofensiva vendrá a menos porque pierden a un jugador élite que representaba el 23 por ciento de las yardas ofensivas, y con 14 touchdowns, el 25 por ciento de los puntos ofensivos del equipo. Insisto, esto pasa no a segundo término, se va hasta el fondo de las prioridades que pueda tener el equipo. La violencia doméstica, particularmente la agresión a una dama, no tiene cabida en ninguna sociedad. Los que la cometen deben sufrir las consecuencias, que de seguro no serán tan altas como el impacto de por vida a la persona agredida.
No me queda la menor duda que Hunt volverá a jugar en la NFL de Tyreek Hill y Joe Mixon. Hill era el jugador estrella de Oklahoma State en 2014. Ese año, visitaron a Oklahoma y Hill fue fundamental para la victoria que tuvieron de visitantes regresando un despeje 90 yardas, empatando el partido a 45 segundos del final. Más tarde ganarían en tiempo extra. Días después, Hill trató de estrangular, le dio un golpe en la cara y otro en el estómago a su novia que estaba encinta con su hijo. Mike Gundy, sin titubear, dio de baja a Hill del equipo a pesar de que era su mejor jugador.
La situación fue diferente con Mixon en Oklahoma. En julio, 2014, Mixon le dio un golpe en la cara, también a una dama, fracturándole la quijada, el pómulo y el hueso orbital. Esto fue más allá de ser violencia doméstica. Este fue un crimen de agresión. Mike Stoops, el head coach de Oklahoma en ese entonces, decidió suspender a Mixon, un jugador con un talento especial, en lugar de despedirlo del equipo. Mixon no jugó en 2014, pero regresó en 2015, y después del 2016, y fue seleccionado por Cincinnati en la segunda ronda del draft de 2017. Mixon fue juzgado legalmente y su “castigo” fue 100 horas de servicio comunitario y terapia. También fue demandado por la agredida y llegaron a un acuerdo. Stoops declaró que de haberse cometido la agresión en 2016, habría suspendido a Mixon. ¿Va en serio? ¿Cuál es la diferencia?
Espero que alguien ayude a Kareem Hunt. No tengo derecho a juzgarlo como persona ni a decidir su futuro, pero es alguien que tiene serios problemas. Salieron ya a la luz otras agresiones que tuvo en los últimos doce meses. Este es un joven que apenas empieza su vida. Espero que Hill y Mixon están 100 por ciento rehabilitados y estén haciendo un esfuerzo por combatir la violencia en general, en particular la doméstica.
La pregunta no es si debe regresar Kareem Hunt a la NFL. Me queda claro que lo va a hacer porque a diferencia de Ray Rice, y al igual que Mixon y Hill, son talentos especiales. Las preguntas que hay que hacer son, ¿Bajo qué circunstancias debe regresar? ¿Qué tiene que demostrar Kareem para ser considerado otra vez por algún equipo? ¿Qué restituciones debe hacer a los agredidos y a la sociedad en general?
Dejando este tema tan difícil, ¿Alguien se percató de la presencia de Baker Mayfield en la banca de Oklahoma durante el campeonato del Big XII? Asistió al partido junto con su gerente general John Dorsey. El juego empezó a las 11 a.m. hora del centro. Cleveland jugaba ese fin de semana en Houston, que está a 384 kilómetros de Dallas, en donde se jugó el campeonato.
Hago referencia a este “pequeño” detalle porque dudo que Baker haya viajado con el equipo. Equipos de la NFL normalmente vuelan 24 horas antes del partido a menos que tengan que volar a una ciudad con dos o tres horas de diferencia. Asumo que Baker y Dorsey tomaron un avión privado para ir a Dallas. No tengo ningún problema cuando jugadores van a ver a sus equipos colegiales durante la semana de descanso, o cuando toca que el juego sea en su ciudad, pero ¿hacerlo un día antes de jugar como visitante ante y más ante un líder de división? ¿Es coincidencia que Baker tuvo tan mal partido?
Un jugador de la NFL tiene que estar enfocado mentalmente en el partido en puerta, más si vas a enfrentar a una defensiva de Romeo Crennel. Tomar las cosas a la ligera es contraproducente. La preparación mental es básica para jugar al más alto nivel. Baker tuvo su peor partido como profesional. Solamente como freshman en el colegial había lanzado tres intercepciones en un partido. Contra Houston tuvo tres en el primer tiempo, incluyendo un “pick-6”. Su equipo se rezagó 0-23, y no se pudieron recuperar. Baker ha mostrado que tiene talento y temperamento para jugar en la NFL. Ahora le falta desarrollar la madurez y la seriedad de un jugador profesional.
Finalmente, me sorprendió el despido de Mike McCarthy ANTES del final de la temporada. Se veía venir a leguas, pero considero que lo que hizo McCarthy por el equipo merecía la consideración que tuvo Andy Reid en Philadelphia. Reid, al igual que McCarthy, fue un coach ganador pero nunca le dio un título a las Águilas. McCarthy y los Empacadores fueron campeones en 2010. El equipo no estaba respondiendo y era palpable la apatía de Aaron Rodgers, y del equipo en general. La derrota ante Arizona fue la gota que derramó el vaso. No puedes perder en casa contra un equipo con sólo dos victorias, ambas contra el mismo equipo, cuando todavía buscas una esperanza pequeña de calificar. Asumo que la situación era tóxica y fuera de control.
McCarthy es un buen entrenador que volverá a ser entrenador en jefe en la NFL. Podría ser en Cleveland en donde Baker Mayfield podría ser desarrollado como quarterback de la misma manera como lo hizo McCarthy con Rodgers. John Dorsey estuvo en Green Bay con McCarthy. Lincoln Riley, el actual entrenador de Oklahoma, sería quizás la primera opción, pero el rumor es que es ÉL quien quiere ir a Dallas.
¿Quién sería ideal para head coach de Green Bay? Tiene que ser un entrenador con experiencia. Dudo que un coordinador ofensivo joven como Eric Bienemy, o John DeFilippo pueda con el paquete de lidiar con Rodgers, quien tiene fama de no ser gente fácil. Dos candidatos me vienen a la mente. El obligado, y del que más se habla para este puesto, es Josh McDaniels, por su experiencia con Tom Brady, y por haber sido ya entrenador en jefe en la NFL.
Otro, del que no se escucha nada, pero que pienso sería la mejor opción es Ken Whisenhunt, el coordinador ofensivo de los Cargadores de San Diego. Whiz se entrevistó este lunes con Georgia Tech, su equipo colegial, por el puesto de head coach. Al momento de escribir esta nota no he leído nada más al respecto. Estuve con Whiz con los Jets brevemente en 1991, pero nos llevamos muy bien porque ambos somos ingenieros civiles, y así lo pude conocer personalmente un poco.
¿Qué otro candidato ha trabajado con un quarterback miembro del Salón de la Fama como Kurt Warner --habiendo revivido su carrera--, y dos futuros miembros del Salón de la Fama como Big Ben y Philip Rivers, y además haya llevado a un equipo al Super Bowl?
En mi humilde opinión, Whiz es el mejor candidato para head coach de Green Bay.
Sin más, ¡rumbo a Atlanta!