MELBOURNE -- Ya había hecho ruido en el US Open. Ahora repite escena en Australia, un lugar particular en su vida: Johanna Konta nació en Sídney. De padres húngaros, la tenista de 24 años de todas maneras se siente británica, país en el que vive -y se nacionalizó- desde hace una década. "Me siento británica. Todos mis amigos y mi historia con el tenis es de ahí", explicó en el pasado.
Lo cierto es que el público local la sigue partido a partido, más aún después de su gran debut victorioso ante Venus Williams. Este sábado, nuevo éxito ante Denisa Allertova por un claro 6-2 y 6-2 y boleto a octavos de final. Con un plus: se convirtió en la primera mujer británica en alcanzar esa ronda en el Abierto de Australia en 29 años.
"Me ha sorprendido la cantidad de apoyo que he recibido. No sé si hay un contingente británico o es por mis raíces australianas. No lo sé. Estoy muy agradecida. Siempre es bueno tener un montón de gente alrededor. Trae buena energía", señaló en conferencia Konta, firme N°1 británica ante la lesión de Laura Robson y la irregularidad de Heather Watson.
"Australia es mi país natal por lo que siempre será un hogar para mí de algún tipo, pero estoy muy contenta de representar a Gran Bretaña. Es mi casa, dónde está mi corazón", intentó alejar rápidamente Konta cualquier tipo de duda.
Sin embargo, la insistencia en la conferencia siguió unos minutos más. Incluso le remarcaron que en Google su apellido continúa aparecieron con una bandera de Australia al lado. "No es la primera vez que se ve ese error. Está todo bien. Definitivamente estoy jugando para Gran Bretaña", señaló la N°47 del mundo, quien este sábado contó en cancha con la especial visita de su hermana, quien sigue viviendo en Australia.
"Es un halago que estén tan interesados en mis raíces australianas, pero por desgracia encontrarán una respuesta aburrida en cada pregunta", intentó cerrar con una sonrisa y buena predisposición ante las consultas de los periodistas locales, quienes le remarcaron que seguramente ahora se alzarán algunas voces coon la intención de "recuperarla" para Australia.
Mientras dos banderas la apoyan, el torneo de Konta continúa adelante. Después un inicio de año con dos derrotas en Hobart y Shenzhen, la británica repite octavos de final de Grand Slam por segunda vez consecutiva. Con una particularidad: en sus anteriores siete presencias en Major una sola vez había pasado el debut, con caída en segunda ronda en Nueva York en 2012. Su próximo partido en Melbourne será ante Ekaterina Makarova, a quien ya venció en el pasto de Eastbourne el año pasado. La británica con raíces australianas va por más.