Despidos entrelazados en la NFL

FECHA
12/12
2011
por Sebastián Martínez Christensen

Todd HaleyGetty ImagesTodd Haley no tenía una buena relación con la gerencia, y además chocó mucho con sus jugadores

MIAMI -- No fue el típico lunes para dos entrenadores de la NFL, que fueron despedidos tras la jornada 14.

El primero de ellos fue Todd Haley de los Kansas City Chiefs.

Si les soy sincero, me sorprendió bastante este movimiento, teniendo el cuenta el timing y la historia reciente del equipo.

Los Chiefs son un equipo plagado de lesiones, incluyendo a su mejor jugador Jamaal Charles, al profundo sensación Eric Berry, al ala cerrada Tony Moeaki y a su mariscal titular Matt Cassel.

Es normal que no sean candidatos a la postemporada esta campaña, de eso no me quedan dudas. Porque a pesar de que todos sufren lesiones, no todas son tan importantes como las que sufrió Kansas City.

Para colmo, muchos parecen olvidarse que los Chiefs ganaron su división la temporada pasada. Es cierto que no es la división más fuerte, pero los Chargers tuvieron la mejor ofensiva y defensiva de la NFL según los ránkings el año pasado.

Y ni aún fue suficiente ante un joven y talentoso equipo de los Chiefs.

Sin embargo, a falta de tres semanas para el final de la temporada regular, Haley fue despedido.

Más allá de que Haley pudo haber hecho mejor las cosas a nivel resultados, la realidad es que el timing del despido tiene más que ver con una mala relación con la gerencia y sus jugadores en general.

No hay dudas de que Haley tiene un gran intelecto futbolístico, pero en demasiadas ocasiones ha chocado con sus estelares jugadores frente a las cámaras, y Cassel ha sido uno de ellos.

Romeo Crennel asumirá como entrenador interino, y es uno de los tres principales candidatos a quedarse con el puesto el año que viene.

Josh McDaniels sorprende al tope de la lista, considerando lo mal que le fue con los Rams este año y el hecho de que su ego, similar a lo que ocurrió con Haley, se interpuso delante de su capacidad de ser un entrenador exitoso.

Eso sí, es una mente ofensiva brillante, y Tim Tebow --al menos por ahora-- lo está probando en lo cierto tras haberlo elegido en la primera ronda.

El tercer candidato sería Jeff Fisher, quien será uno de los nombres más codiciados en el mercado.

En lo personal, creo que Crennel sería una buena opción porque el conjunto tiene cosas interesantes, y de alguna manera estaba yendo en la dirección indicada en algunos conceptos.

Me gustaría que le dieran una segunda y última oportunidad luego de fallar con Cleveland.

CAUSA Y CONSECUENCIA EN MIAMI
Justamente el interés en Fisher, fue la principal causa del posterior despido de Tony Sparano en Miami.

No quedaban dudas de que Sparano iba a ser despedido de los Dolphins, pero la mayoría de nosotros creíamos que sería tras la campaña.

Pero el dueño Stephen Ross quiere un "entrenador de renombre", y ya se vio cómo se le fue uno de las manos cuando Jim Harbaugh fue a los 49ers.

Todd Bowles, entrenador de secundaria, asumirá como interino, y no Mike Nolan, lo cual deja en claro que quieren a un nombre grande.

En aquel entonces fue un proceso muy desprolijo, en el cual el hecho de que los Dolphins tenían un entrenador contratado, influyó en el no de Harbaugh.

Ross quiere a Fisher y no va a dejar que le vuelva a suceder lo mismo. Los Chiefs también lo quieren, y al menos ahora los dos estarán en igualdad de condiciones.

Con el puesto vacante y sin escrúpulos para negociar.

Nuestro colega Chris Mortensen, fue el primero en reportar que los Dolphins contratarían a Carl Peterson como VP de Operaciones. En Miami, lo niegan, pero será simplemente cuestión de tiempo a mi juicio.

Peterson, quien curiosamente fue gerente general de los Chiefs durante 19 años, es además un buen amigo de Ross.

Por ahora, seguiría en el equipo Jeff Ireland como gerente general, pero creo que por su potencial despido pasa el hecho de que todavía no han hecho oficial lo de Peterson.

Las temporadas en la NFL son muy cortas como para perder el tiempo.

Por ende, hoy, dos conjuntos ya empezaron su reconstrucción de cara a la próxima temporada.

Y si tres semanas pueden ser la diferencia entre conseguir el entrenador que quieren o quedarse con un Plan B, bienvenido sea.

Los Dolphins ya pasaron por esta situación --mal manejada por cierto-- y bien no les fue con Sparano, quien creo que es un buen entrenador, pero cuyo tiempo ya había pasado en Miami.

Esta vez, Miami quiere conseguir a su "Harbaugh", y está dispuesto a tirar el protocolo por la ventana para hacerlo.