Cruz y Manning, con un solo pensamiento

FECHA
27/01
2012
por JR Maldonado
Especial para ESPNDeportesLosAngeles.com

NUEVA YORK -- "Es increíble. De niño sueñas con este momento, lo ves por televisión, pero uno mismo tener la oportunidad de saltar al campo de juego y celebrar ir al Super Bowl es algo indescriptible", fueron las palabras del ala abierta Víctor Cruz después que los Giants de Nueva York se coronaron campeones de la Conferencia Nacional al derrotar a los 49ers de San Francisco.

"Ha sido un año increíble y he podido contar con un grupo excepcional de compañeros que me ha mantenido con los pies en la tierra, y les doy todo el crédito por mi éxito a mis compañeros y al cuerpo técnico", añadió el receptor puertorriqueño, quien fue uno de los elementos esenciales del triunfo 20-17 en tiempo extra, recibiendo para 142 yardas.

La impactante victoria del equipo neoyorquino en un enlodado y empapado Candlestick Park sirvió para crear el marco del rencuentro con Nueva Inglaterra en el Super Bowl XLVI, una réplica del campeonato celebrado en el 2007, donde Eli Manning y los Giants les sirvieron de verdugos a Tom Brady y a los Patriots.

Víctor Cruz
Andrew Mills/The Star-Ledger/US PresswireEl puertorriqueño Víctor Cruz se considera afortunado por llegar a un Super Bowl

Sin embargo, la fanfarria de la celebración en San Francisco quedó atrás rápidamente, y el equipo neoyorquino renfocó sus energías en el crucial enfrentamiento del 5 de febrero, evidente en el primer día de práctica regular en las instalaciones de entrenamiento tras el campeonato de conferencia.

Dieciséis integrantes de la plantilla actual de los Giants formaron parte del equipo ganador de aquel Super Bowl XLII, donde Eli Manning fue nombrado Jugador Más Valioso, completando 19 de 34 pases para 255 yardas con dos touchdowns. La derrota 17-14 fue la primera de toda la temporada para Tom Brady, arruinando la "temporada perfecta", por lo cual uno de los temas obligatorios en la rueda de prensa fueron los aires de revancha que rodean el próximo duelo en Indianápolis.

"A estas alturas no se trata de una revancha, sino sobre la oportunidad de ganar un campeonato. Eso es lo que nos ha motivado estas últimas semanas, el poder llegar a clasificar a los playoffs y jugar nuestro mejor fútbol al finalizar la temporada", comentó Manning en la concurrida sala.

El quarterback también destacó la importancia de realizar una preparación equivalente a la de hace cinco años para medirse a los Patriots, a quienes también derrotaron durante la pasada temporada regular, en otro cerrado juego, 24-20, en la semana 9.

"Espero que nuestra preparación sea similar. La última vez nuestro plan fue muy bueno, al igual que nuestra agenda de entrenamiento y reuniones. Hay muchas obligaciones durante la semana del Super Bowl, pero es importante en la medida posible mantener una agenda consistente. Tuvimos una buena práctica, con buen ritmo y energía, y eso es muy bueno sabiendo que tendremos seis prácticas más antes del partido".

Víctor Cruz también se acercó al podio, nuevamente destacando la fortuna que lo ha acompañado, y la oportunidad única de disputar el campeonato máximo de la liga de fútbol estadounidense.

"Hay jugadores que trabajan muy duro por muchos años y no tienen la oportunidad de ni siquiera jugar en los playoffs. Eso demuestra lo difícil que es esta liga y el nivel de competencia, y sé que soy muy afortunado. Ha sido una temporada increíble para mí".

Sin embargo, la rueda de prensa no siempre tuvo un tono alegre, y se tornó tensa cuando el foco de las preguntas se desvió del partido hacia el futuro del hermano de Eli, Peyton Manning, y sobre la singularidad de que el Super Bowl se juegue en su "casa", Indianápolis.

"Nuestro enfoque es en el partido y no en historias no relacionadas", recalcó Eli, al preguntársele sobre si había algún significado particular al jugar en el Lucas Oil Stadium, al igual que contestó con un tajante 'no', no he hablado con él sobre el tema", en cuanto a los rumores de retiro de su hermano.

Sin embargo, Manning se sirvió de un poco de humor para lidiar con la muchas veces incómoda situación, y ante una pregunta sobre el impacto que ha tenido su hermano en su preparación para el Super Bowl, Eli declaró de buen humor: "(Peyton) me ayudó a conseguir algunos boletos que necesitaba para el juego, algo menos por lo cual me tendré que preocupar".

Manning cerró con una sincera evaluación del proceso y de sus consejos para aquellos jugadores con menos experiencia de cara a uno de los momentos más importantes de sus vidas como futbolistas profesionales.

"Lo más importante en un partido tan importante como el Super Bowl es no dejar que la magnitud del evento haga que pienses en otras cosas. Hay que mantener un enfoque simple, en el sentido que ganar un campeonato es una oportunidad excepcional para el equipo, para esta organización. Eso es lo importante, el motivo por el cual estás jugando. Nos queda un solo partido y lo importante es únicamente pensar en jugar tu mejor fútbol. Si piensas en otras cosas, o en lo que podría significar esto o lo otro, ese es el momento en que pierdes enfoque en lo que debería ser tu verdadero trabajo".

Y al parecer Cruz le ha prestado mucha atención a su capitán, igualmente destacando los dos temas principales, el trabajo arduo y el sentido de equipo.

"Estoy tomando las cosas día a día, una práctica a la vez, asegurándome de hacer mi trabajo, eso es lo más importante. Los Patriots son un equipo muy bueno, con gran disciplina, y será difícil pero estamos listos para un gran partido, y estoy confiado en que los Giants seremos los campeones", concluyó.

Reacción Inmediata: Giants 20, 49ers 17

FECHA
23/01
2012
por JR Maldonado
Especial para ESPNDeportesLosAngeles.com
Victor CruzAP photoCruz fue la principal arma de Manning durante todo el encuentro
SAN FRANCISCO -- Tendremos una repetición del Super Bowl XLII. Giants, que venció a los 49ers 20-17, regresa al juego grande tras 4 años desde su última aparición. Y lo hacen casi de la misma manera que en aquella ocasión, siendo visitantes en dos de sus 3 encuentros de postemporada y venciendo en el Juego de Campeonato a unos 49ers que dejaron todo en el campo, pero que sucumbieron ante los Giants que se recuperaron de un mal juego y en tiempo extra culminaron la obra.

CÓMO SUCEDIÓ
En un partido en donde el clima empezó siendo un factor, los 49ers fueron los primeros en capitalizar las condiciones del terreno de juego. Ya que luego de una serie que prometía para Giants, un fumble provocó que los de Nueva York tuvieran que despejar sin poder llegar a la zona roja.

San Francisco tomó el ovoide en su propia yarda 27 y en la segunda jugada de la serie un pase a Vernon Davis, quien corrió 73 yardas por toda la banda quitándose defensores, llevó a los primeros puntos del encuentro para los Gambusinos.

De nuevo los Giants volvían a la ofensiva y su avance parecía seguro, pero tras avanzar 35 yardas, tuvieron que entregar el balón sin poder poner números a la casa. Al mismo tiempo, los 49ers no fueron capaces de mover el balón en su tercera serie del primer cuarto, con lo que el periodo se opacaba al igual que el agua que caía en la ciudad de San Francisco.

Para el segundo cuarto, los Giants fueron más consistentes y armaron una serie de 69 yardas en 10 jugadas para empatar el encuentro, tras un pase cruzado de Eli Manning al ala cerrada, Bear Pascoe, de 6 yardas.

Las siguientes dos series de San Francisco fueron un desastre (dos despejes) sin puntos, dejando a Nueva York 1:34 por jugar, oportunidad que no desperdiciaron y de nuevo recorrieron 51 yardas en 10 jugadas, donde Víctor Cruz fue factor importante, para culminarlo con un gol de campo que daba la ventaja 10-7 y así finalizar la primera mitad del encuentro.

El tercer cuarto empezó con una fiesta para las defensivas de ambos equipos, siendo el común denominador la buena actuación de Cruz, pero sin concretar alguna jugada grande. Mientras que por el lado rojo, Vernon Davis volvió a ser el factor clave de la ofensiva californiana, al atrapar un pase perfecto de 28 yardas de Alex Smith para tomar la ventaja nuevamente (14-10 SF) y conseguir su segunda anotación del partido.

Giants hizo lo que nos tiene acostumbrados: regresar en el último cuarto. Comandados por Eli Manning y tras un grave error de Kyle Williams al tocar el ovoide en un despeje, los de Nueva York armaron una ofensiva de 29 yardas para tomar la ventaja 17-14.

Sin embargo, Alex Smith y la defensiva de los 49ers tenían otro guión escrito. Primero empataron el juego a 17, con una serie de 6 jugadas y 48 yardas. Para luego dejar que la defensa realizara lo que mejor ha hecho durante todo el año, detener a sus rivales con base en una presión agobiante al quarterback, y con ese mismo tono ambos conjuntos no encontraron la forma de llegar a las diagonales.

En tiempo extra las dos defensivas se alzaron dominantes como todo el partido, dejando sin poder avanzar durante las primeras posesiones de ambos conjuntos. Y fue hasta que un error de los 49ers abrió la puerta a Giants para ganar el duelo. Kyle Williams perdió el balón en un regreso de despeje y lo dejó delante de su yarda 20, en donde con tres acarreos de Ahmad Bradshaw, los Giants a través de la pierna de Lawrence Tynes consiguieron el gol de campo que les dio el viaje a Indianápolis.

BRAZO GIGANTE
De nuevo Eli Manning tuvo un gran juego, a pesar de la constante presión de la defensiva de los 49ers, el ya veterano quarterback encontró la forma, muy a su estilo, de liderar a su equipo a la victoria. Lanzó para 316 yardas y tuvo 2 anotaciones, sin que le interceptaran el ovoide.

LA FIGURA
Víctor Cruz, el receptor de origen puertorriqueño, tuvo un gran juego en San Francisco con 10 recepciones y 142 yardas, siendo el objetivo principal de Eli Manning en un juego donde sufrió por las malas condiciones del terreno.

EL DATO
Eli Manning tiene marca de 5-1 como profesional cuando juega de visitante en la postemporada. Y es su segundo viaje al Super Bowl en 4 años, bajo el mando de Tom Coughlin.

EL CLIMA AFECTÓ A AMBOS LADOS
Tal como se esperaba, la lluvia cayó toda la tarde en San Francisco y fue para ambos conjuntos, que por momentos tuvieron sus dudas al atrapar o lanzar y hasta correr con un resbaloso ovoide. Sin embargo, para la segunda mitad las condiciones fueron mejores y permitieron desarrollar un mejor encuentro.

LO PRÓXIMO
Giants descansará la siguiente semana, teniendo prácticas ligeras, para que el lunes 30 de enero hagan el viaje a Indianápolis, sede del Super Bowl XLVI, y prepararse para enfrentar a los New England Patriots el domingo 5 de febrero en el Lucas Oil Stadium.

¿Es Eli mejor que Peyton en playoffs?

FECHA
17/01
2012
por Sebastián Martínez Christensen

Peyton Manning con Eli ManningAPEli Manning tiene mejores números que su hermano Peyton en la postemporada

MIAMI -- Cualquiera que dice que alguna vez no peleó con su hermano miente.

La competencia entre hermanos, a veces amigable y otras veces no, es sana en mi opinión.

Aunque a veces, cuando tu hermano es uno de los mejores mariscales de la historia, es difícil llenar esos zapatos.

Eli Manning ha estado peleando esa batalla desde que fue elegido en el draft, y recién ahora está recibiendo el respeto que muchos creen hace tiempo merecía.

Digo esto porque el menor de los Manning viene de tener posiblemente la mejor temporada de su carrera, tuvo una efectividad impresionante en los últimos cuartos, y confirmó que su reputación de "matar gigantes" no fue casualidad en el 2008.

Si tienen alguna duda, pueden preguntarle a los Green Bay Packers. Pero esa es otra discusión completamente distinta.

Yo fui uno de los que se rió cuando Eli dijo que "pertenecía en el mismo escalafón que Tom Brady" a principios de esta temporada.

Sigo pensando que está por debajo de Brady, Aaron Rodgers, Drew Brees, Ben Roethlisberger y su hermano. Pero si gana otro anillo, tendríamos que volver a replantearnos este debate.

Por lo pronto, lo cierto es que su capacidad para aparecer en momentos importantes, y para ganar en postemporada es irrefutable.

Es por eso que hoy me veo obligado a plantear una pregunta que hace un año me parecía descabellada.

¿Es Eli mejor que Peyton en playoffs?

Peyton tiene un récord de 9-10, tiene una serie ganadora en los minutos finales y un anillo de Super Bowl.

Eli tiene récord de 6-3, tres series ganadoras en los minutos finales y un anillo de Super Bowl.

Por más de que creo que Peyton es uno de los mejores mariscales de la historia, los fríos números demuestran en que en playoffs, la diferencia entre ambos hermanos no es tanto; de hecho hasta parecen favorecer a Eli.

Peyton tiene un porcentaje de victorias de .652 en partidos definidos por siete o menos puntos, mientras que Eli tiene un porcentaje de .581.

Peyton tiene 46 series ganadoras en 227 juegos (.203), mientras que Eli tiene 23 en 129 (0.178). El mayor de los Manning ha estado en 11 postemporadas en 13 años, mientras que Eli ha estado en 5 playoffs en 8 campañas.

No me quedan dudas de que Peyton es un mejor mariscal. Me lo dicen mis ojos, y lo ratifican los números.

Pero insisto que en postemporada, está abierto a debate.

De hecho, para Peyton ha sido debut y despedida en postemporada en 7 de 11 apariciones (.636), mientras que Eli se despidió rápido en 3 de 5 (.600). En este caso, la estadística vuelve a favorecer a Eli.

Cuando planteé esta pregunta en las redes sociales, muchos lectores fueron rápidos a la hora de apuntar que Peyton hubiese ganado más campeonatos con la defensiva de Eli.

Posiblemente sea cierto, pero es imposible saberlo y aquí caemos en el terreno de las suposiciones.

Eli no le cayó bien a muchos desde el momento en que forzó su salida de los Chargers para jugar con los Giants.

Por eso a pesar de ganar un Super Bowl, se tildó de suerte su pase a David Tyree.

Es hora de darle el crédito que se merece. Tiene la confianza, y aunque creo que le falta para estar en la misma oración de los mariscales anteriormente mencionados, definitivamente está justo atrás de ellos.

No se gana un Super Bowl por suerte, y menos se está otra vez cerca de ganarlo.

La pregunta planteada acerca de los hermanos puede sonar a locura para muchos de ustedes, pero la realidad es que los números indican que no es descabellado decir que Eli es el mejor de los Mannings en playoffs.

Y si gana otro anillo, ya no quedarán dudas.

Tim TebowRon Chenoy/US PresswireTim Tebow tuvo su mejor partido como profesional ante los Pittsburgh Steelers el domingo

MIAMI -- Lo primero que quiero hacer es sacarme el sombrero con los Denver Broncos.

El equipo hizo un partido fenomenal y desafió los pronósticos al derrotar a los Pittsburgh Steelers.

Es cierto que Pittsburgh tuvo varias ausencias importantes, pero los Broncos también las tuvieron, y de no haber sido por una grosera falla arbitral --no deberían haber hecho sonar el silbato puesto que el pase fue claramente hacia atrás--, el partido probablemente se habría definido antes.

En otras palabras, en mi mente no quedó ninguna duda de que los Broncos merecieron ganar este partido.

Hago énfasis en la palabra Broncos, porque la prensa mundial parece olvidarse que fue el equipo que ganó este partido, y no exclusivamente Tim Tebow, cuyo nombre está siendo discutido en todas las redes sociales.

Ayer fue probablemente la mejor actuación de Tebow, quien lanzó para 316 yardas ante una defensiva de los Steelers que terminó ranqueada primera en la NFL en la temporada regular, y constantemente dejó espacios en el centro retando al mariscal a ganarles por aire.

Tebow lo hizo, aunque con ayuda del receptor abierto Demaryius Thomas, quien tuvo el mejor encuentro de su carrera, y otros 51 jugadores.

Entiendo que el mariscal suele llevarse las glorias y las críticas, pero en el caso de Tebow, la figura más polarizante de la liga, eso se ha multiplicado por mil.

Por esa razón creo que algunos fanáticos de los Broncos están corriendo antes de caminar.

Sí, Tebow tiene un récord de 8-4 esta temporada como titular. Es un ganador y un buen jugador de fútbol americano que inspira a sus compañeros.

¿Es el mariscal del futuro? No, eso no lo cambia un partido.

Al menos no en mi mente. Pero tampoco en la de la gerencia de los Broncos, que según reportes, estaba lista para colocar a Brady Quinn --no jugó en todo el año-- si Tebow tenía una mala primera mitad.

Ellos han pasado horas y horas estudiando videos, y si no confían en su propio mariscal que está ganando partidos, no es porque no les cae bien, es porque piensan en lo mejor para su futuro.

Ciertamente si Tebow demuestra la capacidad de tener más actuaciones como ésta en semanas consecutivas --siempre y cuando John Fox lo permita--, la confianza del alto mando en él subirá.

Por lo pronto, creo que esta sorprendentemente victoria le compró un año más de titularidad.

Pero quizás sea pan para hoy, hambre para mañana.

Porque si Tebow resulta no ser la respuesta, habrán perdido más tiempo en reconstruir la franquicia pensando en ganar un Super Bowl.

La semana que viene, Denver visita a los Patriots y nadie les da oportunidad. Yo incluído.

Me llama la atención como parece no existir un punto medio en la discusión Tebow.

O es el peor mariscal del mundo o es el próximo Joe Montana.

En lo personal, no coincido con ninguna de las dos apreciaciones, pero sí creo que no es un mariscal que te puede llevar a un Super Bowl.

Ya me ha probado equivocado en el pasado, y quizás lo vuelva a hacer, pero esa es mi manera de ver las cosas.

Es un mariscal que rompe el molde, y aún con más talento a su alrededor, creo que le falta para ser un mariscal de franquicia.

Quizás lo termine siendo, y en ese caso aceptaré haber estado equivocado. El tiempo dirá...

Aunque por lo pronto les pido que mantengan los pies sobre la tierra, y no sean prisioneros del momento.

Reggie WayneUS PresswireReggie Wayne y sus compañeros quieren cerrar la temporada con otra victoria ante un rival divisional

MIAMI -- No quedan dudas de que el encuentro entre los Dallas Cowboys y los New York Giants es el más resonante de la jornada.

Después de todo, no hay mañana para el perdedor. El que gana avanza a la postemporada, y el que pierde se va para su casa.

Pero a la hora de definir el futuro de la liga, creo que hay un partido igual o más importante del cual nadie está hablando.

Dos de los peores equipos de esta campaña se enfrentan cuando los Indianapolis Colts visiten a los Jacksonville Jaguars.

Varios integrantes del equipo dirigido por Jim Caldwell han insistido esta semana en que "jugarán a ganar", y la verdad que creo que ha quedado claro en la historia de este deporte, que nadie juega a perder.

Nunca se sabe quién será tu próximo empleador y poca gente tiene más orgullosos que los jugadores de la NFL.

En otras palabras, no sería descabellado pensar en una potencial victoria de los Colts, que han mejorado su nivel de juego desde que Dan Orlovsky se transformó en el mariscal titular.

Si en efecto Indianapolis consigue su tercera victoria de la temporada, se podría desatar un efecto dominó de enormes consecuencias.

Los Colts y los St. Louis Rams son los únicos dos equipos que pueden hacerse acreedores de la primera selección general del draft, y por ende tendrían la posibilidad de elegir a Andrew Luck, el mariscal que es considerado por la mayoría de los cazatalentos "la cosa más segura desde John Elway".

Si Indianapolis gana, y St. Louis pierde su difícil partido ante los San Francisco 49ers, que todavía deben ganar para asegurarse una semana libre en playoffs, entonces los Rams tendrían esa codiciada selección.

Ya he dicho con anterioridad, y lo sigo pensando, que creo que los Colts tomarían a Andrew Luck con esa primera selección.

El futuro de Peyton Manning está en duda debido a su delicada lesión de cuello, y sería un error de enormes proporciones no elegir al mariscal de la Uiversidad de Stanford.

En este momento, hay numerosos rumores que indican que los Colts intercambiarían a Manning en ese caso. Aunque tampoco creo que eso suceda. Indianapolis le mostrará lealtad a uno de los mejores mariscales de la historia.

Los Colts tendrán dos grandes mariscales, y prácticamente se asegurarían un QB de franquicia durante la próxima década.

Entiendo a aquellos que dicen que Indianapolis tiene muchos huecos, pero a ellos les digo que con este mismo equipo y mejor dirección, los Colts ganaron más de 10 partidos en nueve años consecutivos y un Super Bowl.

Por ende, sí creo que Indy puede ganar el año que viene con Manning, y a futuro con Luck.

Ahora bien, si los Rams se hacen con esa selección, creo que sería otra la historia.

Más allá de que Sam Bradford tiene un historial de lesiones, sigue siendo a mi juicio un mariscal joven con mucho futuro, en el cual los Rams ya invirtieron su primera selección general.

Y si lo pensamos bien, Bradford no tiene armas a su alrededor para brillar por aire. De hecho, el corredor Steven Jackson es la única pieza competente de la ofensiva de St. Louis; es cierto que en plena temporada sumaron a Brandon Lloyd.

Si yo fuese los Rams, le daría confianza a Bradford, y sí intercambiaría la primera selección.

Interesados no faltarían con seguridad.

A la mente se me vienen rápidamente los Washington Redskins, los Miami Dolphins, los Jacksonville Jaguars, los Seattle Seahawks, y posiblemente los New York Jets.

Se especula con que si en efecto se realiza un intercambio por esa primera selección, le podría costar al comprador hasta tres selecciones de primera ronda.

A priori parece ser un precio desmedido, pero si se cumplen las profecías de Andrew Luck, en lo personal creo que nunca se puede pagar de más.

La NFL es una liga de mariscales, y es muy difícil conseguir uno de franquicia.

Tanto, que si uno revisa las primeras selecciones de la última década, prácticamente ninguno ha sido campeón del Super Bowl.

Si Luck resulta ser "lo mejor de Elway", no hay precio que valga.

El año pasado, los equipos mostraron su desesperación al elegir mariscales más arriba de lo que la mayoría pensaba en el draft.

Esta temporada, esa desesperación sólo se verá potenciada con un prospecto como Luck.

Siempre y cuando los Rams consigan esa selección y terminen intercambiandola.

Y todo este efecto dominó estará apoyado básicamente en un partido: Jacksonville vs. Indianapolis.

Dallas y New York se llevarán todos los reflectores, pero estoy seguro de que habrá muchos ojos puestos en este partido.

Drew BreesAP Photo/Rusty CostanzaDrew Brees hizo historia el lunes por la noche ante los Falcons en una noche que fue mágica

MIAMI -- Todos aquellos que se quedaron hasta tarde para terminar de ver el juego entre los Falcons y los Saints, a pesar de que ya estaba definido, tuvimos la oportunidad de presenciar historia.

Drew Brees se hizo acreedor que duró 27 años en manos de Dan Marino, y se convirtió en el mariscal en lanzar para más yardas en una temporada.

Hay que empezar diciendo que no hay mejor persona para entrar en el libro de los récords.

Brees ha revertido las fortunas de este equipo de New Orleans, les dio el primer título en la historia de la franquicia, y aún más importante es una persona humilde que siempre te trata con respeto.

Muchos cazatalentos pensaban que no tenía la estatura necesaria (1,80) para ser un mariscal efectivo en la NFL, y los Chargers y Dolphins no confiaron en él cuando se lesionó.

Más allá de que he criticado seguido al gerente general A.J. Smith, no lo puedo culpar por la decisión de optar por Philip Rivers. Tuvieron una primera selección en el draft, y Brees, quien no rindió a su mejor nivel en San Diego, sufrió una dura lesión en su hombro derecho.

Sin embargo, sí culpo a Miami, que al igual que ha hecho a lo largo de la última década y media, por tomar otra mala decisión.

Para los que conocen los detalles de la historia, los Dolphins estaban en busca de un mariscal --todavía continúa la búsqueda--. Las opciones era Daunte Culpepper, quien venía de una seria lesión de rodilla, o Drew Brees que se había lesionado en el hombro con el cual lanza el ovoide.

La gerencia de Miami estaba en duda en ese entonces, pero fue el ese entonces entrenador de los Dolphins el que inclinó la balanza hacia el lado de Culpepper.

Nick Saban, persona no grata en Miami, le dijo a Brees en su cara: "Veo apenas un 25 por ciento de probabilidades de que te recuperes de tu lesión en el hombro".

Brees prefería jugar en Miami según su propia admisión, pero en sus palabras, "en ese entonces me quedó claro que New Orleans me quería y los Dolphins tenían dudas".

Por suerte para la ciudad de New Orleans, que necesitó de un líder para recuperarse anímicamente de la tragedia del huracán Katrina, Brees llegó a Lousiana.

Para Miami, la suerte no fue la misma. Y justamente en la semana en la cual Brees rompe uno de los pocos récords que le quedan al ídolo de la ciudad Dan Marino, el propio Saban estará buscando otro título nacional a nivel universitario.

Imposible saber para cuántas yardas lanzaría Marino en la NFL de hoy en día, donde las reglas fomentan grandes ofensivas y no tocar esencialmente ni a los mariscales ni a los receptores abiertos.

Pero aunque creo que Brees es merecedor del premio, sigo considerando a Marino el mejor pasador puro de la historia.

En cuanto al premio del Jugador Más Valioso se refiere, Brees habría sido acreedor de este premio en cualquiera otra temporada, quizás a excepción del 2007, cuando Tom Brady demostró no ser humano.

Esta campaña, el premio le pertenecerá a Aaron Rodgers, que también está teniendo una de las mejores temporadas de la historia.

Rodgers tiene 45 touchdowns contra los 41 de Brees, pero mucho influye en las estadísticas el sistema de juego.

Brees ha lanzado 120 pases más que Rodgers, que según la proyección de estadísticas, tendría más yardas que el mariscal de New Orleans de haber lanzado la misma cantidad de pases.

Rodgers tiene mi voto, aunque todavía existe la posibilidad de un empate. Es 50 el número de votos, y ha habido una igualdad en tres ocasiones en la historia.

Dos enormes mariscales con grandes temporadas.

Los dos merecedores, aunque a mi juicio el premio quedará a manos de Rodgers.

Sin embargo, Brees es el hombre del momento con su récord.

Todos disfrutaron de un día histórico en la NFL el lunes por la noche. Todos menos los que están en Miami.

Nosotros simplemente nos quedamos imaginando ¿qué hubiese ocurrido?...

Hakeem Nicks, Victor CruzNick Laham/Getty ImagesLos receptores abiertos de los Giants no pueden dejar caer tantos pases si quieren vencer a los Jets

MIAMI -- No es oficialmente un partido eliminatorio, pero podría no haber mañana para varios de los involucrados en el juego que los Jets y los Giants protagonizarán en la Gran Manzana.

Ninguno de los dos quedaría eliminado de la postemporada con una derrota --al menos no hasta esperar otros resultados--, pero ambos verían sus posibilidades muy lastimadas.

El entrenador de los Jets, Rex Ryan, encendió la mecha a principios de semana al decir que "no vine aquí para ser segundo de nadie", dando a entender que son el mejor equipo de la ciudad.

Los Giants fueron rápidos a la hora de responder, pero en realidad no hacía falta más motivación.

Sobre todo si eres Tom Coughlin, dado que prácticamente te estás jugando el trabajo.

Si los Giants no clasifican a playoffs, muchos creen que el entrenador sería despedido.

No porque sea un mal entrenador --hizo un gran trabajo en Jacksonville y ganó un Super Bowl en New York--, sino porque creen que las inconsistencias del equipo son producto del final de un ciclo; a veces un cambio es simplemente necesario.

El trabajo de Ryan no corre peligro, pero sí el vestidor.

El entrenador de los Jets siempre ha sido muy vocal, y en épocas de éxito, esa estrategia es muy positiva. Pero cuando se empiezan a apilar las derrotas...

Si tu hablas, tus jugadores también lo van a hacer. Cuando no hay victorias, un vestidor lleno de personalidades grandes como el de Jets empieza a cansarse de que su entrenador sea el principal protagonista y no los propios jugadores.

A mi me gusta que el entrenador asuma la presión, pero el ego de los jugadores a veces no les permite pensar de la misma forma.

Con una derrota, los Jets necesitarían ayuda de los Bengals, Titans y Chargers, entre otros. Los Giants, por su parte, necesitarían una mano de los Eagles, y luego una derrota de Philadelphia en la última semana.

Dicho de otra manera, una derrota significaría que quedarían prácticamente eliminados.

Estos dos equipos han demostrado en los últimos años que los partidos importantes le sientan bien.

En los Giants, el talento está allí, pero a veces parecen carecer de motivación. Eso no será un problema esta semana.

Sin embargo, a pesar de que históricamente los Giants son un "mata-gigantes", este año perdieron cuatro juegos consecutivos ante buenos equipos: San Francisco, Philadelphia, New Orleans y Green Bay.

Los Jets, por su parte, han ganado partidos que pocos esperaban en los últimos años en los que llegaron a dos Campeonatos de la AFC de forma consecutiva.

El problema es que su línea ofensiva no es la misma de antes, y su defensiva, por alguna razón, no se muestra tan dominante.

Eso sí, siendo justos con el tan criticado por mí Mark Sánchez, el joven mariscal suele aparecer en los momentos importantes.

Lo que sí creo que es una verguenza, es el hecho de que este partido no se juegue a la misma hora que el duelo entre Eagles y Cowboys, que también es en la costa Este.

Digo, si ganan los Giants, ni Dallas ni Philadelphia tendrán nada por lo qué jugar un par de horas más tarde.

Eso no es justo, y la NFL debería corregirlo a futuro.

Pero en lo que respecta al duelo en la Gran Manzana, no hay partidos mucho más importantes que este.

Sueños de playoffs, continuidad laboral, ego citadino y problemas de vestidor, son simplemente algunos de los condimentos.

Aunque oficialmente no los sea, un partido de postemporada con todas las letras.

Los playoffs arrancaron temprano.

Atrás quedó la gloria de la NFC Este

FECHA
20/12
2011
por Sebastián Martínez Christensen

GiantsJeff Zelevansky/Getty ImagesLos fans de los Giants se han mostrado muy decepcionados con la temporada de su equipo

MIAMI -- Pensar que un par de años atrás, la NFC Este era considerada, unánimemente la mejor división de la NFL.

Ha pasado mucha agua por debajo del puente desde entonces, y hoy por hoy es simplemente una división que nadie parece querer ganar.

En un principio, las épocas doradas parecían estar de regreso luego de la furiosa temporada baja que tuvieron los Philadelphia Eagles con tantas adquisiciones de renombre.

Sin embargo, el rótulo de "Dream Team" le quedó muy grande, y se transformaron rápidamente en la decepción de la temporada.

Los Cowboys perdieron partidos que sólo ellos pueden perder ante los Jets y los Lions, y la mayoría de ustedes selló su suerte prematuramente.

Los Redskins empezaron sorprendiendo, pero luego se dieron cuenta de algo que sabía todo el mundo menos Mike Shanahan: No tienen mariscal.

Y todos estos indicios iniciales nos dejaron con los New York Giants como el gran candidato a ganar la división, algo que fue respaldado por el control inicial que tuvieron sobre la misma.

Pero una derrota, en ese entonces incomprensible ante los Seahawks, fue el primer indicio de su inconsistencia.

Más tarde llegó la parte más dura de su calendario y no dieron la talla; fueron cuatro derrotas en fila para ceder el liderazgo de la división.

Cuando menos lo esperábamos, no obstante, derrotaron a los Cowboys a domicilio, y volvieron a controlar su destino.

Aunque como era de esperar a esta altura, salieron sin energía y cayeron sin atenuantes ante los Redskins la semana pasada.

En lo personal, respeto mucho a Tom Coughlin, quien hizo un gran trabajo con unos Jaguars de expansión y luego ganó un Super Bowl con estos Giants, pero lo culpo a él por las inconsistencias de los Giants, que no estaban preparados para jugar.

Es cierto que él no puede atrapar los pases que deja caer Hakeem Nicks, pero la falta de voluntad no tiene justificativo nunca, y menos en un partido tan importante.

Lo bueno para los Giants es que siguen controlando su destino, porque les tocará cerrar la temporada ante los Cowboys, que al momento están un juego por encima de ellos, pero con la desventaja del desempate.

Lo malo es que antes tienen un partido duro que Rex Ryan, como de costumbre, ya se ha encargado de calentar ante los Jets.

Los de verde no son la quinta maravilla del mundo, pero estos Giants pueden perder con cualquiera.

Dallas, por su parte, con un Tony Romo que ha lanzado 21 touchdowns y tres intercepciones en los últimos nueve partidos, también controla su destino.

No obstante, tendrán que superar el escollo de no haber tenido un gran pasado en el mes de diciembre.

La división ha sido tan mediocre este año que hasta los Eagles tienen posibilidades de ganar esta división si ganan sus dos juegos, los Jets derrotan a los Giants, y los Cowboys pierden ante New York.

Philadelphia enfrenta a Dallas, a quien ya vapuleó, esta semana, y cierra con un mejorado equipo de los Redskins desde que Roy Helu asumió como corredor titular y desde el regreso de Santana Moss.

En otras palabras, aunque me mantengo en mi pronóstico de Dallas, todo es posible en la NFC Este.

Una división que antes era conocida por ser potencia, y hoy nadie quiere ganar.

Alguien va a tener que asumir el rol de líder en estas últimas dos semanas, y si el calendario seigue el curso esperado, enfrentaría a los Atlanta Falcons en la ronda del comodín.

A esta altura del partido, con los Falcons en alza, no elegiría a ninguno de los potenciales representantes de la NFC Este a avanzar a la ronda divisional.

Hasta esto hemos llegado.

¿División pareja? Sí. ¿Mediocre? También.

Tim TebowUS PresswireTim Tebow ha callado bocas a base de triunfos. ¿Será el futuro de los Denver Broncos?

MIAMI -- Habría que ser necio para no reconocer el impacto que ha tenido Tim Tebow en los Denver Broncos desde que asumió la titularidad.

Después de todo, los Broncos tienen un récord de 7-1 con él, son líderes de una débil división y están ganando a pesar de tener un equipo con menos talento que otros que están en peor situación.

La NFL está acostumbrada a ciertos lineamientos, como por ejemplo que el mariscal debe ser alto, lanzar bien desde el bolsillo y ser preciso con sus pases.

Tebow no cumple con ninguno de esos requisitos, y por eso su éxito no se puede explicar a través de la lógica para los cazatalentos.

Uno de los mejores jugadores universitarios de la historia, contra todo pronóstico, esta "brillando" en la NFL.

Digo contra todo pronóstico, porque el éxito universitario no siempre se traslada a la NFL. Ejemplos como Ken Dorsey, Gino Torreta, Matt Leinart y muchos más, sobran.

Entiendo la emoción de los fanáticos de los Broncos, y no pretendo pincharles el globo. Simplemente creo que nunca será un mariscal de elite.

Cuando Denver pierde, Tebow es criticado de más, y cuando gana es venerado como un Dios. Los culpables somos nosotros; la prensa.

Tebow es un ganador nato, pero completa apenas el 48.7 por ciento de sus pases, y su equipo ha anotado 18 puntos o menos en seis de sus ocho titularidades esta temporada.

Esos son hechos irrefutables.

Su capacidad de liderazgo es segunda únicamente de Ray Lewis probablemente, e insisto que su influencia en sus compañeros no se puede medir.

Llámenme cuantitativo, pero creo que al igual que todos, me cuesta más creer lo que no puedo ver.

Así gana Tebow, apoyado en su fe en Dios. Alrededor suyo, suceden cosas inusuales que suelen guiar a su equipo al triunfo.

Tebow le dijo al apoyador Wesley Woodyard, quien forzó el balón suelto a Marion Barber la semana pasada: "No te preocupes, hablé con Dios".

Eso fue minutos antes de que realizara la jugada que cambió el partido, según comentó Woodyard.

Creencias aparte, creo que la mente es una herramienta muy poderosa, y muchas veces el poder de voluntad te lleva a superar los obstáculos.

Tebow le hizo creer a Woodyard que podía, y el apoyador pudo.

En lo personal, prefiero no justificar sus victorias en elementos sobrenaturales, porque creo que sería faltarle el respeto a su habilidad sobre el campo.

Pero a la vez sigo sin creer que es la solución a largo plazo para los Broncos.

Se que tiene un récord de 7-1, pero John Skelton tiene registro de 4-1 con Arizona, y nadie está pidiendo que sea el mariscal franquicia de los Cardinals.

No es algo personal contra Tebow, es simplemente lo que pienso.

Igualmente debo admitir que me encuentro queriendo que los Broncos clasifiquen a playoffs, para verlo en un partido donde no hay mañana.

La expectativa sería enorme, y en lo personal creo que Denver se encontraría en problemas.

Pero el deporte nunca fue algo predecible, y por eso lo amamos.

Nos regala momentos como estos, jugadores como Tebow.

Ahora se viene un duelo de cuidado ante New England, cuya defensiva está ranqueada última, y me gustaría ver a John Fox dándole rienda suelta a Tebow. Pero dudo que eso suceda, porque hasta al entrenador le cuesta confiar en su mariscal.

Mientras esperamos por ese momento, veo como Tebow se declara ganador en el ahora. ¿Ganará a futuro?

No lo creo. Pero eso es lo mismo que pensé ayer...

Despidos entrelazados en la NFL

FECHA
12/12
2011
por Sebastián Martínez Christensen

Todd HaleyGetty ImagesTodd Haley no tenía una buena relación con la gerencia, y además chocó mucho con sus jugadores

MIAMI -- No fue el típico lunes para dos entrenadores de la NFL, que fueron despedidos tras la jornada 14.

El primero de ellos fue Todd Haley de los Kansas City Chiefs.

Si les soy sincero, me sorprendió bastante este movimiento, teniendo el cuenta el timing y la historia reciente del equipo.

Los Chiefs son un equipo plagado de lesiones, incluyendo a su mejor jugador Jamaal Charles, al profundo sensación Eric Berry, al ala cerrada Tony Moeaki y a su mariscal titular Matt Cassel.

Es normal que no sean candidatos a la postemporada esta campaña, de eso no me quedan dudas. Porque a pesar de que todos sufren lesiones, no todas son tan importantes como las que sufrió Kansas City.

Para colmo, muchos parecen olvidarse que los Chiefs ganaron su división la temporada pasada. Es cierto que no es la división más fuerte, pero los Chargers tuvieron la mejor ofensiva y defensiva de la NFL según los ránkings el año pasado.

Y ni aún fue suficiente ante un joven y talentoso equipo de los Chiefs.

Sin embargo, a falta de tres semanas para el final de la temporada regular, Haley fue despedido.

Más allá de que Haley pudo haber hecho mejor las cosas a nivel resultados, la realidad es que el timing del despido tiene más que ver con una mala relación con la gerencia y sus jugadores en general.

No hay dudas de que Haley tiene un gran intelecto futbolístico, pero en demasiadas ocasiones ha chocado con sus estelares jugadores frente a las cámaras, y Cassel ha sido uno de ellos.

Romeo Crennel asumirá como entrenador interino, y es uno de los tres principales candidatos a quedarse con el puesto el año que viene.

Josh McDaniels sorprende al tope de la lista, considerando lo mal que le fue con los Rams este año y el hecho de que su ego, similar a lo que ocurrió con Haley, se interpuso delante de su capacidad de ser un entrenador exitoso.

Eso sí, es una mente ofensiva brillante, y Tim Tebow --al menos por ahora-- lo está probando en lo cierto tras haberlo elegido en la primera ronda.

El tercer candidato sería Jeff Fisher, quien será uno de los nombres más codiciados en el mercado.

En lo personal, creo que Crennel sería una buena opción porque el conjunto tiene cosas interesantes, y de alguna manera estaba yendo en la dirección indicada en algunos conceptos.

Me gustaría que le dieran una segunda y última oportunidad luego de fallar con Cleveland.

CAUSA Y CONSECUENCIA EN MIAMI
Justamente el interés en Fisher, fue la principal causa del posterior despido de Tony Sparano en Miami.

No quedaban dudas de que Sparano iba a ser despedido de los Dolphins, pero la mayoría de nosotros creíamos que sería tras la campaña.

Pero el dueño Stephen Ross quiere un "entrenador de renombre", y ya se vio cómo se le fue uno de las manos cuando Jim Harbaugh fue a los 49ers.

Todd Bowles, entrenador de secundaria, asumirá como interino, y no Mike Nolan, lo cual deja en claro que quieren a un nombre grande.

En aquel entonces fue un proceso muy desprolijo, en el cual el hecho de que los Dolphins tenían un entrenador contratado, influyó en el no de Harbaugh.

Ross quiere a Fisher y no va a dejar que le vuelva a suceder lo mismo. Los Chiefs también lo quieren, y al menos ahora los dos estarán en igualdad de condiciones.

Con el puesto vacante y sin escrúpulos para negociar.

Nuestro colega Chris Mortensen, fue el primero en reportar que los Dolphins contratarían a Carl Peterson como VP de Operaciones. En Miami, lo niegan, pero será simplemente cuestión de tiempo a mi juicio.

Peterson, quien curiosamente fue gerente general de los Chiefs durante 19 años, es además un buen amigo de Ross.

Por ahora, seguiría en el equipo Jeff Ireland como gerente general, pero creo que por su potencial despido pasa el hecho de que todavía no han hecho oficial lo de Peterson.

Las temporadas en la NFL son muy cortas como para perder el tiempo.

Por ende, hoy, dos conjuntos ya empezaron su reconstrucción de cara a la próxima temporada.

Y si tres semanas pueden ser la diferencia entre conseguir el entrenador que quieren o quedarse con un Plan B, bienvenido sea.

Los Dolphins ya pasaron por esta situación --mal manejada por cierto-- y bien no les fue con Sparano, quien creo que es un buen entrenador, pero cuyo tiempo ya había pasado en Miami.

Esta vez, Miami quiere conseguir a su "Harbaugh", y está dispuesto a tirar el protocolo por la ventana para hacerlo.

Donovan McNabb debería retirarse

FECHA
02/12
2011
por Sebastián Martínez Christensen

Donovan McNabbAPLas cosas no funcionaron para Donovan en Minnesota. Es hora de que este talentoso mariscal se retire de la NFL

MIAMI -- Decir adiós a tu carrera y lo que más amas, es lo más difícil en la vida de un deportista profesional.

Ejemplos como Brett Favre sobran. Algunos me dirán que el gran número 4 todavía podía jugar en los últimos años cuando fue el tema central de cada una de las temporadas bajas.

Probablemente sea cierto, pero ¿podía guiar a un equipo al título? No. ¿Ensució un poco su legado con tantas idas y venidas? Sí.

Donovan McNabb ha sido uno de los mejores mariscales de la última década.

El ex mariscal de la Universidad de Syracuse guió a los Philadelphia Eagles a cinco campeonatos de la NFC, a un Super Bowl, y solía ser una amenaza tanto por aire como por tierra.

De hecho, si me apuran, diría que McNabb ha sido uno de los mejores cuatro mariscales de los últimos 10 años.

Pero el tiempo no perdona a ninguno de nosotros y tampoco a este talentoso mariscal.

Al igual que le sucedió en Washington, se termina yendo por la puerta de atrás en Minnesota.

Otra vez reemplazado en plena temporada, ésta vez McNabb pidió ser liberado, y los Vikings, cuya temporada está perdido, le dieron la luz verde.

Evidentemente, McNabb tiene la intención de seguir jugando y lesiones de mariscales en otros equipos, harán que franquicias estén interesados en él.

Pero siendo sincero, no creo que sea ni una buena decisión para esos equipos ni para el propio McNabb.

Los Houston Texans perdieron a dos mariscales en Matt Schaub y Matt Leinart. Son un equipo completo que todavía creo ganará su división. Pelear por cosas en los playoffs es otra historia.

El novato T.J. Yates es el titular en este momento, y realmente creo que es beneficioso para el equipo ver de qué está hecho este joven.

McNabb puede ser algo mejor que Yates en este momento, pero probablemente tampoco te guie a un Super Bowl, y sí hace que le cierres la puerta en la cara al futuro de tu franquicia.

Los números de McNabb en seis juegos esta campaña no han sido tan malos; cuatro touchdowns, más de 1000 yardas y apenas dos intercepciones. El problema es que en ningún juego superó un índice de pasador de 100, y aún más importante, Minnesota terminó con récord de 1-5 en sus encuentros.

El trabajo del mariscal va más allá de las estadísticas. Su trabajo en inspirar --lease Tim Tebow--, y McNabb está excedido de peso, ya no es temido por sus rivales y no puede guiar a un equipo al título.

Esa es la cruda realidad.

Otro de los equipos interesados son los Chicago Bears. Tras la lesión de Jay Cutler, Caleb Hanie ha tomado las riendas del equipo.

A juzgar por lo hecho por Hanie la semana pasada, los Bears están en problemas.

McNabb no debería ni siquiera considerar esta opción porque Cutler podría volver en la postemporada. Por ende si McNabb, en el mejor de los escenarios, rinde bien y guia a Chicago a los playoffs, luego terminaría tomando un rol secundaria otra vez cuando más importa.

Para los Bears, en este caso, sí tiene sentido como una especie de "alquiler", pero yo no estoy convencido que los pueda guiar al éxito.

Sí, Chicago tiene un gran ataque terrestre, pero acaso hay alguien mejor que Adrian Peterson. En los Vikings, que también tienen una buena defensiva, no fue suficiente para ganar. Tampoco lo será en Chicago.

Igualmente, los Dallas Cowboys están listos para trabar esta transacción. Al igual que sucedió con Kyle Orton, Dallas lo pediría en waivers para evitar que vaya a un rival por la pelea por clasificar a playoffs.

Si McNabb está empeñado en volver, los Texans sería el equipo que hace más sentido porque controlaría su propio destino. Porque tendría la oportunidad de ganar el título que nunca ganó. Pero realmente dudo que vaya a hacerlo, y no creo que le convenga a Houston.

McNabb fue nombrado el jugador de la década en el Big East en los años 90. Su impacto fue evidente en la NFL, cuando transformó a los Eagles en los Buffalo Bills de la NFC, salvando las distancias.

Pero aunque Campeonatos de la NFC no son Super Bowls, tampoco es fácil mantener esa hegemonía en la liga más pareja del mundo.

Repito, McNabb es uno de los mejores cuatro mariscales de la última década.

Y más allá de lo que piense Terrell Owens, es un gran profesional, que manejó situaciones muy complicadas de manera extraordinaria, como pocos de sus colegas hubiesen hecho.

Pero ahora es momento de colgar los botines. Está excedido de peso, y ya pasó su época.

Si vuelve, seguirá lastimando sus posibilidades de ingresar al Salón de la Fama.

Si es que todavía las tiene...

AL INICIO