Las rachas están para romperse, reza el refrán, tal como lo cumplió al pie de la letra el tenista argentino Sebastián Báez (19°) este viernes en el Madrid Open, imponiéndose 6-4, 6-7 (2) y 6-3 al francés Luca Van Assche (99°) para reponerse a sus últimas cuatro caídas al hilo en el circuito.
Luego de despedirse rápidamente en Miami, Monte-Carlo y Barcelona, el bonaerense, de 23 años y dueño de seis títulos, que se había despedido en su segundo compromiso en Indian Wells y sacó para partido en el segundo set, sufrió más de la cuenta en su compromiso en la cancha 6 del coqueto complejo, donde totalizó tres aces, 67% de puntos ganados en su primer servicio, cinco break points concretados y tres roturas otorgadas en dos horas y 57 minutos de peloteo.
De esta manera, el pupilo de Sebastián Gutiérrez, quien atravesó una destacada gira sudamericana sobre polvo de ladrillo, coronándose en Río y Santiago, y alcanzando semifinales en Córdoba y cuartos de final en Buenos Aires, igualó su mejor desempeño en la capital española, registrado la edición pasada, oportunidad en que debutó con festejo versus el estadounidense Marcos Giron y posteriomente cedió frente al griego Stefanos Tsitsipas.
En la próxima instancia, buscando estrenarse absolutamente entre los 16 mejores en un torneo Masters 1000, enfrentará al ganador del duelo entre el norteamericano Taylor Fritz (13°) y el italiano Luciano Darderi (60°).